Transfería a sus cuentas dinero de empresa en la que trabajaba
La mujer de aproximadamente 70 años de edad entró en colapso nervioso al escuchar los cargos, por lo que debió ser trasladada de emergencia a hospital
Alexis Massieu
La Prensa
Tras conocer los cargos que se levantaron en su contra por el robo de 2 millones 509 mil 689 pesos, en la empresa para la que trabajaba, una mujer adulta mayor comenzó a sentirse mal, y al ver que no paraba de temblar, la jueza que está a cargo de la audiencia inicial, pidió ayuda, llegando al Centro de Justicia Penal paramédicos del Departamento de Bomberos para trasladarla a un hospital.
Se trata de Ludivina “N”, de aproximadamente 70 años de edad, quien fue acusada de robarse mediante transferencias electrónicas, el dinero de una cuenta bancaria que le confiaron en la empresa Super Express y Cargas del Centro, de tal forma que entre los pagos a los proveedores, incluyó en múltiples ocasiones sus propias cuentas, una de Bancomer y la otra de Banco Azteca.
La acusada se indicó, trabajaba para la empresa afectada desde el año 2014, y entre otras funciones, estaba a cargo de realizar pagos mediante trasferencias electrónicas a los proveedores.
Los robos, fueron descubiertos el 13 de agosto del año pasado, cuando la empresa contrató a un contador, y al estar revisando los números, detectó diversas anomalías, pese a que cuando le pedía a Ludivina “N”, que le entregara los estados de cuenta, ella se tardaba mucho, presuntamente porque los falsificaba para ocultar los desvíos de dinero.
Aprovechando que la acusada había obtenido un permiso para ausentarse por la muerte de su padre, y dadas las fuertes sospechas que se tenían de ella, se pusieron a revisar los papeles, y le solicitaron al banco que les enviara los estados de cuenta desde el año 2017 a la fecha, saliendo a relucir movimientos no aprobados desde el año 2019 hasta el mes de julio del 2024.
Una de las maneras en que operaba la supuesta ladrona de aproximadamente 70 años de edad, es que ella reportaba gastos que en realidad eran transferencias a sus cuentas, mientras que en otras ocasiones le quitaba diversas sumas a las transferencias de los clientes, para depositar el dinero en las de ella.
Cuando la jueza le dio la oportunidad de declarar a Ludivina “N”, por consejo de su abogada de oficio, decidió guardar silencio, siendo a partir de ese momento, que en el rostro de la acusada comenzaba a ser notorio un extraño movimiento en sus labios.
Una vez expuso el Ministerio Público cuáles son las pruebas que se tienen en su contra, incluyendo una gran cantidad de libros y hojas con los estados de cuenta y las transferencias electrónicas, que la juzgadora le preguntó a Ludivina “N”, en qué momento iba a querer que le resolviera su situación jurídica, ¿en esa misma fecha, dentro 72 o 144 horas?, y notó que la acusada temblando mucho.
Al tiempo que se le ofrecía agua a Ludivina “N”, el personal del Centro de Justicia Penal, pidió una ambulancia para que atendieran a la acusada, ya que la adulta mayor había ido sola al juzgado, llegando elementos del Departamento de Bomberos de Ciudad Frontera, quienes tras suministrarle oxígeno, señalaron que era necesario llevarla a recibir atención médica.
La audiencia inicial en contra de la presunta ladrona, se reanudará el próximo 29 de enero a las 10:30 horas, fecha en la que se decidirá si la vinculan o no a proceso por el delito de robo de cuantía mayor por tenencia precaria y con abuso de confianza, dentro de la causa 1157/2024.