Calles, avenidas y centros de trabajo lucen completamente vacíos en las últimas dos semanas, desde que el Gobierno de Donald Trump empezó a desplegar la cacería de migrantes
Por Wendy Riojas
LA PRENSA
Los monclovenses en Estados Unidos narran la difícil situación que se vive en el país vecino a raíz de las repatriaciones que se han llevado a cabo, ya que, las calles, bulevares y centros de trabajo lucen completamente vacíos en las últimas 2 semanas.
Algunos comparten videos de como se vive en Estados Unidos luego de que sacaran a miles de personas indocumentadas de su territorio, cuando son una base fundamental para los comercios en el país.
Por ejemplo, el monclovense Bismark Marrufo reveló: “Bendito mi Dios yo estoy legal en el país, pero lamentablemente hay millones de paisanos arreglando su situación legal en este país que nos ha dado tanto”.
Él monclovense narra el miedo que se respira en las calles, casas y departamentos y que muchas familias lamentablemente están siendo separadas por las políticas migratorias del Presidente de Estados Unidos Donald Trump.
Y señala: “Dios cuide y bendiga a tantas familias que están siendo separadas, el miedo se percibe en las calles, el miedo se está apoderando en muchas casas/apartamentos. Mantengan la calma y sigamos trabajando, Dios tiene la última palabra”.
Incluso comparte un video donde muestra: “Una de las principales avenidas de Dallas prácticamente esta vacía, siempre, siempre esta llena y con mucho tráfico y hoy nada de tráfico, así de asustada está la gente”.
Coinciden en que las calles jamás se habían visto tan solitarias y que en el ambiente se percibe la incertidumbre y temor de la gente de encontrarse con autoridades migratorias, lo que representa un duro golpe para la economía de Estados Unidos.
También comparten las cadenas humanas que se han hecho para proteger a la comunidad migrante de los agentes de migración, las manifestaciones y otros movimientos en contra de las repatriaciones.
Así como videos de centros comerciales que se han quedado sin productos y sin personal que este trabajando en las cajas de cobro, es decir, que son una parte fundamental para los centros de trabajo.