El mexidracon longimanus, o dragón mexicano de manos largas, fue descubierto en el año 2014, en el ejido Porvenir de Jalpa, General Cepeda
Por Daniel Santiago/Milenio
La Prensa
SALTILLO, COAHUILA.- Investigadores del Museo de Paleontología de la Benemérita Escuela Normal Superior de Coahuila presentaron este jueves, una nueva especie de dinosaurio, Mexidracon Longimanus, encontrado en el año 2014, en General Cepeda, y publicado en una revista científica internacional, el pasado 28 de enero.
Aunque Coahuila se ha distinguido por ser una tierra rica en cuanto a fósiles de dinosaurios, el reciente descubrimiento realizado por paleontólogos de la Benemérita Escuela Normal de Coahuila, en conjunto con la Universidad Nacional Autónoma de México, y universidades de Estados Unidos y España, pone a la entidad nuevamente en el mapa de la comunidad científica a nivel internacional.
El mexidracon longimanus, o dragón mexicano de manos largas, fue descubierto en el año 2014, en el ejido Porvenir de Jalpa, en el municipio de General Cepeda, por el profesor Claudio de León. Tras este hallazgo vino un trabajo de cuatro años para poder extraer los restos que se encontraban atrapados dentro de una roca, y otros seis años de investigación y análisis.
El número de fósiles encontrados, permiten a los investigadores creer que se trata de un dinosaurio que quedó atrapado dentro de un pozo de lodo, lo que permitió su conservación.
Características
Belinda Espinoza, encargada del Museo de Paleontología, afirmó que se trata de una especie que habitó hace 72.5 millones de años, en el periodo conocido como cretácico superior.
“El material fue hallado semi articulado, qué quiere decir, que fue estaba todo junto, entonces no cabe duda de que se trate de diferentes organismos, sino que es uno solo. Incluso muchos de los huesos están todos juntos, en un mismo bloque, que fue el que nos tardó cuatro años en limpiarlo”, afirmó Belinda Espinoza.
El mexidracon longimanus, posee características de la familia de los ornitomímidos, aunque tiene un rasgo que lo distingue, que es el que los huesos de sus manos, son más largos que los de sus pies.
El maestro en ciencias, Claudio de León, afirmó que este dinosaurio emplumado, que guarda una similitud con los avestruces, era omnívoro, y medía alrededor de dos metros de largo y hasta un metro y medio de alto.
La dieta de esta especie, estaba compuesta de cangrejos, insectos, libélulas, plantas, frutos, semillas y roedores, por lo que se cree que era un hábil cazador, según afirmó el profesor Claudio de León.
“Cuando se empiezan a encontrar con material que no aparece en los libros, que no aparece en los estudios, dijeron bueno de qué se trata esto, y entonces se tuvo que hacer un estudio mucho más profundo para poder estar seguros de que se trataba de algo único en el mundo, algo endémico en el mundo de los dinosaurios y ahora tenemos este importante hallazgo”, afirmó Claudio de León.
Según los investigadores, el dragón mexicano de manos largas, tenía plumas en varias partes del cuerpo, una característica que comparten con otros ejemplares encontrados en otras regiones del mundo.
El hallazgo fue publicado en la revista científica internacional Cretaceous Research, el pasado 28 de enero, luego de años de trabajo de investigación, y permite conocer sobre las diferencias en las especies que se tenían entre los dinosaurios que existían en la zona de lo que ahora son Canadá, Estados Unidos y México.
Aunque por el momento, solo se exhiben las piezas encontradas, a futuro se podrá tener una representación para exhibirse dentro del Museo de Paleontología de la Benemérita Escuela Normal de Coahuila, que apenas el año anterior, dio a conocer el descubrimiento del coahuilasaurus lipani.