El avistamiento de una familia de pecaríes en Nuevo León ha alarmado a los habitantes.
Como si se tratara de un safari, un grupo de personas que circulaban en Cumbres García, Nuevo León, se toparon con toda una familia de pecaríes que cruzaban una avenida.
Las personas que fueron testigo de esta escena se expresaron sorprendidas, pero no con la presencia de estos animales –que es cada vez más común- sino con la cantidad de mamíferos que estaban en un mismo punto.
Los vecinos fueron respetuosos con los pecaríes y les dejaron que pasaran tranquilamente por su camino con rumbo a un monte, zona en donde estarían más cómodos y seguros.
Usuarios en redes sociales que tuvieron la oportunidad de ver el video reaccionaron contentos por la manera en cómo se dio este encuentro entre las personas y los pecaríes, que seguramente estaban en busca de la cena.
¿Qué son los pecaríes?
Los pecaríes son mamíferos placentarios del orden Artiodactyla, de la familia Tayassuidae.
Se les conoce comúnmente como jabalíes americanos o cerdos salvajes americanos, sin embargo, no están emparentados cercanamente con los jabalíes ni con los cerdos.
¿Qué hacer si me muerde un pecarí?
Los pecarí no son considerados una especie peligrosa para los habitantes, pero se pueden suscitar ataques por parte de estos debido a defender su territorio o crías.
Sufrir una mordedura de pecarí se considera de riesgo si no se atiende a tiempo ya que estas especies pueden tener cierto tipo de bacterias o infecciones.
De acuerdo con los expertos en medio ambiente detallan una serie de acciones si sufres una mordida de pecarí:
Mantén la calma
Intenta no entrar en pánico y evalúa la gravedad de la mordida. Esto ayudará a actuar mejor ante la situación de riesgo.
Lava la herida
Limpia la herida con agua y jabón neutro durante varios minutos. Asegúrate de eliminar cualquier resto de suciedad o saliva del animal. Los expertos coinciden que estos pueden cargar cierto tipo de bacterias o infecciones.
Detén el sangrado
Si la herida sangra, aplica presión directamente sobre ella con un paño limpio y seco. Mantén la presión hasta que el sangrado se detenga.
Desinfecta la herida
Utiliza un antiséptico suave, como alcohol o yodo diluido, para desinfectar la herida y prevenir infecciones.
Cubre la herida
Protege la herida con una gasa estéril y un vendaje limpio. Esto con la finalidad de proteger la herida el tiempo que tomes para acudir a un médico. Además de esto ayuda a evitar infecciones, mantener la humedad y favorecer la cicatrización.
Acude al médico
Es importante que acudas a un centro de salud lo antes posible para que un profesional evalúe la herida y determine si necesitas algún tratamiento adicional, como antibióticos o la vacuna antirrábica.