El uso de tinte para el cabello ha sido estudiado por su posible relación con el cáncer. Esto es lo que dice la ciencia al respecto.
¿El tinte para el cabello puede causar cáncer? Algunas investigaciones científicas han encontrado asociaciones entre ciertos tipos de tintes y el desarrollo de enfermedades como el cáncer de vejiga y de mama, aunque la evidencia no es concluyente.
¿Cuál es la relación entre tintes y el cáncer, según la ciencia?
Las investigaciones sobre tintes capilares se han centrado especialmente en el cáncer de vejiga, particularmente en peluqueras expuestas a estos productos antes de la década de 1980, explicó David J. Goldberg, dermatólogo del Grupo Dermatológico Schweiger de Nueva York.
Sin embargo, la formulación de los tintes para el cabello ha cambiado con el tiempo, lo que podría haber reducido este riesgo.
En el caso del cáncer de mama, un estudio de 2019 con más de 46,000 mujeres encontró que quienes usaban tintes permanentes con frecuencia (cada cinco a ocho semanas) tenían un riesgo un 9% mayor de desarrollar la enfermedad en comparación con quienes no los usaban.
Según Alexandra White, epidemióloga del Instituto Nacional de Ciencias de la Salud Ambiental, este aumento es pequeño en términos absolutos, pero es más pronunciado en mujeres negras, quienes presentaban un incremento del 60% en el riesgo de cáncer de mama con el uso frecuente de estos productos.
La razón detrás de esta diferencia racial aún no está clara, aunque expertos como Nada Elbuluk, profesora de dermatología en la Facultad de Medicina Keck, sugieren que otros productos capilares, como los alisadores químicos y relajantes, podrían desempeñar un papel en el riesgo.
¿Qué tintes son más seguros?
Uno de los desafíos para determinar el nivel de riesgo es la gran variabilidad en las formulaciones químicas de los tintes para el cabello.
White explica que, a diferencia de los productos farmacéuticos, los tintes para el cabello no están estrictamente regulados y los fabricantes no siempre revelan todos sus ingredientes.
No obstante, los estudios han encontrado que los tintes semipermanentes y temporales, que se eliminan con los lavados, parecen ser más seguros que los tintes permanentes. Se cree que los compuestos químicos presentes en los tintes permanentes, como las aminas aromáticas y los fenoles, pueden tener efectos cancerígenos.
Recomendaciones para un uso más seguro
Si bien no hay pruebas definitivas de que los tintes para el cabello causan cáncer por sí solos, los expertos sugieren algunas estrategias para reducir posibles riesgos:
- Reducir la frecuencia de uso: Aunque la relación no es concluyente, disminuir la cantidad de veces que se aplica tinte podría ser una medida preventiva.
- Evitar tintes permanentes durante el embarazo: Algunas sustancias químicas presentes en los tintes pueden aumentar el riesgo de problemas en el desarrollo del feto, especialmente en el primer trimestre.
- Seguir las instrucciones del producto: Usar guantes, aplicar el tinte en un área bien ventilada y enjuagar bien el cuero cabelludo pueden ayudar a reducir la exposición a sustancias químicas.
- Optar por tintes para el cabello más suaves: Los tintes semipermanentes, temporales o a base de plantas, como la henna, pueden ser alternativas más seguras.
A pesar de estas precauciones, los expertos coinciden en que se necesita más investigación para comprender mejor la relación entre los tintes para el cabello y el cáncer. Mientras tanto, quienes usan estos productos pueden evaluar los riesgos y tomar decisiones informadas sobre su cuidado capilar.
POR: EXCELSIOR