La Prensa
Agencias
El 6 de marzo, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos informó que entregó a México a Ariel Núñez Figueroa, uno de los presuntos vinculados en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, hecho ocurrido el 26 de septiembre de 2014.
El hombre, de 30 años de edad, se encontraba residiendo de manera irregular en el país norteamericano y era buscado por las autoridades mexicanas tras su presunta participación en el caso ocurrido en el estado de Guerrero, a las afueras de Iguala, luego de un enfrentamiento entre los estudiantes y policías municipales.
¿Cómo se logró su arresto?
A través de una tarjeta informativa, el ICE dio a conocer que la expulsión y entrega a las autoridades mexicanas derivó de un reporte de la Interpol, el cual alertó que el hombre probablemente vivía en Houston, Texas.
Sobre su ingreso a los Estados Unidos, no hay detalles exactos de fecha y lugar; sin embargo, se precisa que gracias a acciones conjuntas entre distintos equipos de autoridades, Núñez fue detenido el 9 de septiembre de 2024, y posteriormente, el 22 de enero, su entrega a México fue ordenada por el Departamento de Justicia.
«Durante casi once años, este fugitivo extranjero evadió a las autoridades mientras la familia y los amigos de esos 43 estudiantes que fueron brutalmente asesinados esperaban pacientemente justicia para sus seres queridos», de acuerdo con declaraciones del director de la Oficina de Campo de Houston de Operaciones de Detención y Deportación del ICE, Bret Bradford.
¿Cuál fue su papel en el caso Ayotzinapa?
De acuerdo con la Narrativa de los Hechos, presentada por el gobierno de México en septiembre de 2023, policías municipales de Huitzuco se llevaron a un grupo de los estudiantes para que «El patrón» decidiera qué hacer con ellos.
Entre esos elementos policiales se encontraban Marcelo Villalba Adame, Luis Antonio Morales, Jovani Salgado Rivera, Rodolfo Nava Ortiz, Juan Alberto Montes Carbajal y Celedonio Núñez Figueroa, hijo del director de Policía de dicho municipio y hermano de Ariel, con quien también se mantuvieron intercambios telefónicos la noche de la desaparición.