El Padre Néstor Martínez, durante el mensaje en la parroquia Santiago Apóstol llamó a la transformación personal desde una perspectiva evangélica
Fabiola Sánchez
LA PRENSA
En el marco del quinto domingo de Cuaresma, la comunidad de la iglesia de Santiago Apóstol participó en una homilía reflexiva a cargo del sacerdote Néstor Martínez, quien abordó la importancia del perdón y la transformación personal desde una perspectiva evangélica.
Durante su mensaje, el religioso retomó el pasaje bíblico en el que Jesús responde a los acusadores de una mujer sorprendida en adulterio con la célebre frase: «El que esté libre de pecado, que tire la primera piedra».
En este contexto, el padre Martínez subrayó que el relato no solo resalta la misericordia divina, sino que también invita a la autocrítica y al reconocimiento de las propias faltas antes de juzgar a los demás.
El sacerdote enfatizó que el perdón no implica la justificación del error, sino la oportunidad de redención y explicó que Jesús no absolvió sin más a la mujer, sino que le brindó la posibilidad de un nuevo comienzo con la exhortación: «Vete, no peques más en adelante».
Resaltó ante los feligreses congregados en misa que, esta enseñanza evangélica constituye un llamado a la transformación personal y a la vivencia de la fe con autenticidad.
En su mensaje final, el sacerdote instó a los fieles a vivir la Cuaresma como un periodo de reflexión y cambio genuino, más allá del cumplimiento de tradiciones o rituales.