PROMETÍA COMPRAR AUTOS Y ACABABA AMENAZANDO DE MUERTE
Su líder Ana María usaba identidades falsas para engañar a sus víctimas; defraudó a vendedores de carros en Sabinas y Cuatro Ciénegas
Alexis Massieu
La Prensa
Gracias a las denuncias ciudadanas y a una ardua investigación, la Fiscalía General del Estado logró desarticular a una banda de estafadores dedicados al robo de vehículos en Monclova y Sabinas, arrestando a una mujer oriunda de Tabasco cuyo papel era el de hacerse pasar por una compradora y apoderarse de las unidades mediante una transferencia falsa.
Se trata de Ana María “N”, una funcionaria pública federal, que ya fuera con su nombre real, o mediante una identidad falsa, decía estar interesada en la compra de vehículos que se ponían en venta mediante las redes sociales, y que la tarde de ayer fue presentada ante el Juez Penal Oscar Cadena García, acusada de los delitos de extorsión, fraude y amenazas.
Según la acusación que realizó el Ministerio Público, la afectada de nombre Claudia, vecina del municipio de Cuatro Ciénegas decidió vender su camioneta con ayuda de un amigo de nombre Raúl, quien el pasado 25 de marzo (2025) publicó en sus cuentas de redes sociales que tenía en venta una camioneta Ford Lobo de color plateado, modelo 2009, aquí en Monclova.
Al día siguiente comenzó a recibir mensajes de personas interesadas en comprar la pick-up, y una de esas personas era un hombre que dijo que le interesaba ir a verla, ante lo cual agendaron una cita al día siguiente en la casa del propio Raúl, localizada en la Zona Centro de Monclova.
Fue así que el 27 de marzo, pasadas las 10:00 horas, el vendedor recibió una llamada, en la que el mismo hombre con el que quedó de verse para enseñarle la Lobo, le avisaba que era su esposa quien iría a verla, la cual apenas llegar, se puso a inspeccionarla, y le dijo que sí les interesaba, y que le diera una cuenta para transferirle los 190 mil pesos que pedían por ella.
Durante este tiempo, Ana María “N”, a quien se le notaba el acento sureño, le dijo a Raúl que la camioneta era para su esposo, un supuesto militar con grado de mayor, del 105 Batallón de Infantería, de nombre Auri Gómez, y que necesitaban el vehículo porque acababan de llegar y tenía que traerse varias cosas.
En dado momento le indicó que ya le habían hecho la transferencia del dinero mediante el depósito de un cheque, pero que este se haría afectivo luego de 36 horas, y como él se mostró desconfiado, le dijeron que hablara al banco, y así lo hizo, “confirmándole el banco” que la transferencia estaba en curso.
Ante la insistencia del hombre con el que hablaba por teléfono, y el de la propia Ana María “N”, de que le dejara llevarse la camioneta, Raúl le dio las llaves, pero no le entregó los papeles, incluyendo la factura, negándose también a que ella le sacara una fotografía al documento.
En ese momento Raúl pensaba que el dinero de la venta sí le iba a llegar a su cuenta, ya que no había entregado la factura, la cual habían quedado que se la daría hasta el día siguiente al supuesto militar en las instalaciones del 105 Batallón, pero; en lugar del dinero lo que le empezó allegar fueron amenazas.
Le dijeron que eran parte de la delincuencia organizada, que estaban vigilando su casa, y que si no les entregaba la factura le iba a ir muy mal “ira papá, te va a cargar la…”, le decía el supuesto militar que ahora se identificaba como Gerardo Treviño alias “El Huevo”, líder de un cartel.
El extorsionador le dijo a Raúl que sabía que a él le iba bien económicamente hablando, y que quería que le depositara 20 mil pesos, que hiciera eso, y entonces le regresarían la camioneta, que al cabo sin los papeles nomás les serviría para tirar dos o tres muertos.
En su declaración ante el Ministerio Público, Raúl señaló que cuando Ana María “N” llegó a su casa, le pidió de favor que la dejara pasar al baño, y ese fue presuntamente el momento en el que ella sacó fotografías de su casa, para que sus cómplices supieran de sus posibilidades económicas.
Raúl les depositó los 20 mil pesos a la cuenta que le dio el hombre que lo estaba amenazado, y cuando le exigió más dinero le dijo que ya no tenía, siendo el 28 de marzo, cuando el banco le avisó que el cheque que le habían depositado no tenía fondos.
Cuando el juez le dio a Ana María “N” la oportunidad de declarar, aconsejada por un defensor particular, prefirió guardar silencio, solicitándole al juzgador que le concediera el plazo de las 144 horas para poder acreditar su inocencia, razón por la que la audiencia inicial se suspendió, y será el próximo viernes, cuando se decida si la vinculan o no a proceso dentro de la causa penal 402/2025.
Dado que la extorsión es un delito que de acuerdo a la Constitución, amerita prisión preventiva de oficio, Ana María “N” fue enviada a la cárcel, donde permanecerá hasta que se resuelva su situación legal.
EL ROBO EN SABINAS
Al menos tres, son los casos de robo de vehículos en los que se encuentra involucrada Ana María “N” y su banda de estafadores, dos de ellos en Monclova y uno más en Sabinas, el cual ya se está siendo investigado por parte de la Delegación de la FGE en la Región Carbonífera, y se espera que pronto llegue a las manos de un juez.
Según trascendió el día de ayer, usando identificaciones falsas a nombre de Edna Alicia García Madrid, pero con su fotografía, Ana María “N”, engañó a un vendedor de automóviles, apoderándose de un Chevrolet Malibu.
Tras contactar al vendedor de nombre Juan Humberto, mediante redes sociales, él y Ana María “N”, que se presentó como Edna Alicia, originaria de Hermosillo, Sonora, se vieron el pasado 4 de abril en el estacionamiento de la tienda Coppel, localizada en la Zona Centro de la Ciudad, para cerrar el trato.
La mecánica de la estafa fue muy similar a las que ocurrieron en Monclova, sólo que en esta ocasión, el que le hablaba por teléfono decía llamarse Tomás Velázquez Ávila y ser un agente de la Guardia Nacional, y para demostrarlo, ella le mostró al vendedor varias identificaciones falsas de su supuesto marido “militar”.
Luego entonces; fue la transferencia que no se reflejó de manera inmediata, y la insistencia de los estafadores de que les entregara las llaves en ese mismo momento, a lo que el vendedor accedió, siendo hasta el día siguiente que vio en redes sociales que gente de Monclova estaba alertando a los demás sobre los ladrones de automóviles.
LA BANDA DE ESTAFADORES
Durante la audiencia del día de ayer, y de acuerdo a la información que se publica en el portal swebrepo.tabasco.gob.mx, trascendió que Ana María “N”, es Jefe del Departamento de Recursos Materiales y Servicios, en el Hospital Regional de Alta Especialidad “Gustavo A. Rovirosa Pérez”, en Tabasco.
Si bien, decidió no declarar en cuando a los delitos que presuntamente cometió en relación al robo de la Ford Lobo, decidió romper el silenció para revelar que ella tiene su domicilio en aquel Estado, junto a una hija que dentro de poco se va a graduar como doctora, y que si bien trabaja para el Estado, su plaza o remuneración es federal dentro del IMSS-Bienestar.
Extra oficial mente, trascendió que su cómplice es su pareja, al cual conoció mediante redes sociales y se encuentra recluido en un penal de la Ciudad de México.
En gran medida, fue gracias a que el pasado 6 de abril una de las víctimas de las estafas de Ana María “N”, pudo localizarla en la plaza del Magisterio de Monclova, a punto de abordar un transporte tipo “rait”, logrando su captura, la policía al atender un reporte de amenazas hecho por la tabasqueña a la afectada, quien la videograbó y la subió a las redes sociales para alertar a los demás.
