Con esta significativa ceremonia, que abre la Semana Santa, se invita a todos los fieles a convertirse en peregrinos de la esperanza
Alexis Massieu
La Prensa
Con la celebración del Domingo de Ramos, el día de ayer la comunidad católica monclovense, dio inicio a la Semana Santa 2025, y a un año jubilar en que se invita a todos los fieles a convertirse en los peregrinos de la esperanza.
Fue desde la Parroquia Santiago Apóstol, que el Párroco Néstor Daniel Martínez encabezó una emotiva homilía, con la cual le recordó a nuestra comunidad que la Semana Santa es una carta de amor escrita por Dios a través de su hijo Jesús, quien entregó su vida por la humanidad.
Durante la celebración de la misa, que estuvo abarrotada, el sacerdote le recordó a los asistentes, que en esta vida somos todos, unos peregrinos con una meta en común: la Jerusalén celestial.
La celebración del Domingo de Ramos, explicó: se remonta a la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén, montado en un burro, como símbolo de humildad y paz, donde precisamente ese tipo de bienvenidas usando ramos por parte de la población, sólo se le daba a personas importantes.
El Padre Néstor, invitó a los fieles a vivir la Semana Santa con fe y devoción, reconociendo a Jesús como su Salvador. E Hizo un llamado a que cada uno, desde su propia vida, desde su trabajo, su hogar y su familia, sus alegrías y sus dificultades, pueda alabar al Señor y agradecer por tanto amor.
«Que esta Semana Santa sea un momento de encuentro profundo con Dios», dijo el Párroco, reconociendo que hay cosas que nos duelen, como la violencia, el desempleo y la injusticia. «Bendito tú que has venido en el nombre del Señor, para salvar mi vida».