La víspera, el Departamento de Educación congeló dos mil 200 millones de subvenciones federales para el establecimiento
El presidente Donald Trump amenazó con despojar a Harvard de sus ventajas fiscales después de que la prestigiosa universidad estadounidense se negara a plegarse a sus exigencias.
Harvard «debería perder su estatus de exención fiscal y ser gravada como una entidad política», dijo el mandatario republicano en su red Truth Social.
Este último ataque se produce un día después de que su gobierno y el Departamento de Educación decidiera congelar dos mil 200 millones de dólares en subvenciones federales plurianuales a Harvard.
La universidad privada con sede cerca de Boston (noreste), dotada de un patrimonio de más de 50 mil millones de dólares, goza de una exención fiscal federal y otra del estado de Massachusetts.
Al igual que otros campus estadounidenses, Harvard ha sido escenario de protestas estudiantiles contra la guerra de Israel en Gaza, en el punto de mira de la Casa Blanca desde que Donald Trump volvió al poder en enero.
El republicano acusa a Harvard y a otras universidades de permitir que el antisemitismo florezca en sus campus, y su gobierno les ha pedido una serie de medidas, como una «auditoría» de las opiniones de estudiantes y profesores, como condición para evitar que les retire las subvenciones.
Harvard, a diferencia de la universidad de Columbia en Nueva York, se ha negado a cumplir estas exigencias.
En una carta a estudiantes y profesores, el presidente de la universidad, Alan Garber, aseguró el lunes que Harvard «no abandonará su independencia ni sus derechos garantizados por la Constitución».
Obama: Ningún gobierno puede dictar a las universidades privadas qué enseñar
En las últimas horas, el expresidente de Estados Unidos, Barack Obama salió en defensa de la reconocida universidad en el pulso que sostiene con la administración de Trump.
En su cuenta de X, Obama reposteó un mensaje del presidente de Harvard, Alan Garber, que decía que «ningún gobierno, del partido que sea, puede dictar a las universidades privadas qué enseñar, a quién admitir, a quién contratar y qué materias de investigación seguir».
Para Obama, Harvard «ha brindado un ejemplo para otras instituciones educativas superiores: rechazar las tentativas torpes e ilegales de sofocar la libertad académica«, y en lugar de eso ha preferido garantizar a sus estudiantes «un entorno de curiosidad intelectual, debate riguroso y respeto mutuo».
Y concluye: «Esperemos que otras instituciones sigan su ejemplo», una alusión apenas velada a otras universidades también amenazadas con retirada de fondos federales y que, en algunos casos llamativos con el de la Universidad de Columbia en Nueva York, han adoptado una actitud mucho más complaciente con las exigencias del gobierno de Trump.
Por El Universal