En la parroquia Santiago Apóstol fue colocado un moño negro en el atrio, y se llevó a cabo un solemne repique de campanas anunciando la misa por el Sumo Pontífice
Luis Ángel Estrada
La Prensa
Con profundo pesar y recogimiento, autoridades eclesiásticas de la iglesia Santiago Apóstol realizaron la tarde de ayer un homenaje luctuoso en memoria del Papa Francisco, quien falleció el día de ayer en Roma, Italia.
El emotivo acto inició con la colocación de un moño negro en el atrio del templo, símbolo del duelo que embarga a la comunidad católica local. Posteriormente, se llevó a cabo un repique solemne de campanas, anunciando el inicio de la misa en conmemoración del Sumo Pontífice.
La ceremonia fue encabezada por el vicario de la parroquia, Néstor Martínez, quien dirigió palabras de consuelo a los fieles que, visiblemente consternados, se dieron cita para rendir tributo al líder espiritual de la Iglesia católica.
Durante la homilía, el vicario destacó el legado de humildad, justicia y amor al prójimo que caracterizó el pontificado de Francisco. “Nos deja un testimonio vivo de fe, compromiso social y cercanía con los más necesitados. Hoy oramos por su alma y por la continuidad de su obra”, expresó.