CUMPLE ESI 63 AÑOS DE HABER SIDO FUNDADA
La Escuela Superior de Ingeniería mantiene vivo su legado minero mientras impulsa nuevas carreras técnicas y científicas
Por: Roberto Ulíbarri
LA PRENSA
NUEVA ROSITA, COAHUILA. – Este 11 de mayo se cumplen 63 años de la inauguración de uno de los íconos educativos más importantes del norte de Coahuila: la Escuela de Minería y Metalurgia de Nueva Rosita, hoy conocida como Escuela Superior de Ingeniería.
Fundada en 1962 en plena efervescencia minera de la región carbonífera, esta institución ha forjado generaciones de ingenieros, técnicos y geólogos que no solo alimentaron el desarrollo industrial local, sino también tejieron la identidad de una comunidad profundamente ligada al subsuelo.
El ingeniero Horacio Domínguez —egresado de la generación de 2004 y descendiente de otro exalumno del plantel en 1977— hace un recorrido íntimo y directo por la historia del plantel, marcada por la gloria, la transformación y también la polémica.
DEL CARBÓN A LA DIVERSIFICACIÓN
La Escuela fue inaugurada en 1962 para responder a la enorme demanda de especialistas en minería y metalurgia. Apenas cinco años después, en 1967, egresaba la primera generación de ingenieros mineros. Durante décadas, la escuela fue cuna de geólogos, exploradores, técnicos y metalurgistas que abastecieron de talento a las minas de Guadalupe, MIMOSA y otras empresas clave de la región.
Sin embargo, hacia finales del siglo XX, el panorama comenzó a cambiar. En 1999, ante una baja en la matrícula y el aumento de accidentes mineros, la institución adoptó el nombre de Escuela Superior de Ingeniería, abriendo nuevas carreras como Ingeniería en Procesos de Manufactura, Electricidad, Mecánica y Soldadura, alejándose de su perfil exclusivamente minero.
UN MONUMENTO, MUCHAS HISTORIAS
Uno de los episodios más simbólicos de esta transformación fue la remoción, en el año 2000, del monumento al minero ubicado en la entrada principal. Representaba a un trabajador con la boca abierta, emulando una bocamina. Bajo la dirección de Francisco Rico, se argumentó que este cambio buscaba modernizar la imagen institucional y atraer nuevos perfiles de estudiantes. Sin embargo, la nostalgia popular nunca se extinguió, y una década más tarde, el mismo monumento fue restaurado y reinstalado en su lugar original, donde permanece hasta hoy.
VOCACIÓN, ORGULLO Y CONFLICTO
La publicación de Domínguez no esquiva los episodios turbulentos. Recuerda que en 2002, durante su generación, la contienda por la dirección académica derivó en enfrentamientos violentos entre planillas, con consecuencias serias para alumnos y maestros, incluyendo expulsiones. A pesar de ello, la vocación por la ingeniería minera persistió. En 2004 egresó la penúltima generación de ingenieros mineros y metalurgistas, antes de que la carrera fuera temporalmente suspendida y reemplazada por la prometedora Ingeniería en Recursos Naturales y Energéticos.
Afortunadamente, con el tiempo, la escuela recuperó su esencia. Hoy, carreras como Ingeniería en Recursos Minerales y Energéticos e Ingeniería Geológica vuelven a estar en su oferta académica, mostrando que la historia no se borra, solo se transforma.
OFERTA ACADÉMICA ACTUAL
Hoy en día, la Escuela Superior de Ingeniería ofrece una sólida y diversificada oferta académica respaldada por la Universidad Autónoma de Coahuila:
Licenciaturas:
Ingeniero Geólogo
Ingeniero en Recursos Minerales y Energéticos
Ingeniero Industrial y de Sistemas
Ingeniería en Geociencias y Recursos Hídricos
Ingeniería en Tecnologías Químicas
Posgrados:
Maestría en Exploración y Aprovechamiento Sustentable de los Recursos Minerales
Diplomados:
Geología y Exploración de Hidrocarburos
Explotación de Hidrocarburos
Geología de Yacimientos de Carbón
Gestión Ambiental
Metalurgia Extractiva
Procesamiento de Minerales
Esta oferta demuestra que la institución sigue siendo una columna vertebral del conocimiento técnico especializado en el norte del país, sin abandonar sus raíces, pero adaptándose a las nuevas exigencias del sector energético, ambiental y manufacturero.
UNA ESCUELA QUE ES SÍMBOLO
A más de seis décadas de su fundación, la Escuela Superior de Ingeniería sigue siendo más que un edificio o un plan de estudios: es un símbolo de lucha, orgullo regional y resiliencia. Como lo escribe Horacio Domínguez, quien alguna vez aspiró a ser ingeniero electromecánico y terminó honrando las raíces mineras de su padre: “Aquí andamos aún, con mucho orgullo de ser ingeniero minero y metalurgista.”
Este aniversario no solo celebra el pasado. También recuerda que la formación técnica y la identidad regional pueden y deben caminar juntas, incluso cuando el camino cambia de nombre.