Legisladores migrantes señalaron que la medida es discriminatoria y una forma de presionar al Gobierno mexicano
Por Staff/Agencia Reforma
La Prensa
CIUDAD DE MÉXICO.- Legisladores y activistas coincidieron en que el posible gravamen del 5 por ciento a las remesas que se envían desde Estados Unidos impactará en el bolsillo de las familias de los migrantes mexicanos.
En entrevistas separadas, los legisladores migrantes Karina Ruiz, de Morena, y Raúl Torres, del PAN, así como el director de Fuerza Migrante, Jaime Lucero, señalaron que la medida es discriminatoria y una forma de presionar al Gobierno mexicano.
“Va impactar a la economía de los familiares en México, que ya no van a estar recibiendo todo ese dinerito que ya de por sí les hace falta para cubrir cosas básicas de primera necesidad”, apuntó la senadora Ruiz.
Actualmente, dijo, el dinero de las remesas se destina a alimentación, ropa para la escuela, en los niños, en atención médica, a diferencia de antes, cuando el dinero se mandaba con el propósito de constituir un patrimonio en México.
En tanto, el diputado del Congreso de la Ciudad de México, el panista Raúl Torres, señaló que con la inflación y la caída del peso, los paisanos se han visto en la necesidad de aumentar el monto de las remesas, lo que ya representaba dificultades para la economía familiar.
“Ahora, si hay un impuesto sobre ello, entonces costaría muchísimo más el poder (mandar)”, afirmó.
Para Jaime Lucero, presidente de Fuerza Migrante, la medida podría disuadir a los paisanos para enviar dinero a sus familiares en México.
“Los entendidos (calculan que las remesas anuales) son más de 60 mil millones de dólares , es un dineral que van a dejar de recibir (las familias con el 5 por ciento de impuesto)”, indicó.
Consideró que la medida es discriminatoria debido a que su principal propósito es incentivar que más migrantes regresen a sus países de origen.
Apuntó que este no es un caso aislado, sino que no es la continuación de las duras políticas antimigrantes que catapultaron la campaña presidencial del republicano Donald Trump.
“Se está utilizando a migrantes para la idea de que se vayan, se repatrien voluntariamente, se vayan por su cuenta. El chiste es seguir empujando”, explicó.
La senadora Ruiz coincidió que el Gobierno estadounidense no reconoce el trabajo que los migrantes realizan en Estados Unidos, que aportan alrededor del 10 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
El 80 por ciento de esa riqueza, explicó, se queda en esa nación y solo el 20 por ciento es lo que se envía a México.
Por otro lado, el diputado Torres apuntó que la medida podría estar vinculada a una investigación que surgió durante la Administración de Joe Biden, en la que se planteaba que los grupos delincuenciales lavaban sus ingresos mediante mecanismos de envío de remesas.
“Salió esta información sobre que un monto de remesas que estaba llegando a estados como Michoacán y Sinaloa, donde no se encontraba la paridad de ingresos con la salida, por lo cual se tenía esta sospecha de que tuviera que ver con el lavado de dinero”, recordó.
Sin embargo, dijo, la medida es otra forma de presionar al Gobierno mexicano para obligarlo a cumplir su promesa de frenar el tráfico de precursores del fentanilo.
“El Gobierno mexicano ha fallado en la estrategia de seguridad con los Estados Unidos; no ha cumplido en las metas de la Presidenta Sheinbaum con el Presidente Trump respecto a los precursores del fentanilo, ni a las detenciones de los principales capos de la droga”, indicó.
La senadora y el activista exhortaron a la Presidenta Sheinbaum a dialogar con las autoridades estadounidenses para evitar la implementación de las nuevas tarifas.
“Que se busque una solución para no afectar a estas personas, que son vidas reales, y que yo creo que lejos de mitigar la migración pueden incluso recrudecerla”, mencionó Karina Ruiz.
“Debería de haber más negociación, México tiene muchas maneras de tratar el tema, es el socio comercial número uno”, añadió Lucero.