Fueron encontrados calcinados; investigan si son los tres mecánicos y un adolescente reportados como desaparecidos
Por Iris Velázquez/Agencia Reforma
La Prensa
CD. DE MÉXICO.- Cuatro cuerpos apilados y calcinados fueron hallados en el poblado C-14 del Municipio de Cárdenas, Tabasco, tras alertas de pobladores.
Autoridades investigan si se trata de los tres mecánicos y el adolescente reportados como desaparecidos en la entidad.
Familiares de Gabriel Murillo Pavón (48 años), Juan Cordero Jiménez (45 años), José Genaro Ocampo Ramírez (38 años) y de Nelson Díaz Córdova, un adolescente de 14 años, se encuentran en la sede de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Tabasco en espera de poder identificar los cadáveres.
Los tres adultos son trabajadores de un taller mecánico en Dos Montes, Villahermosa, mientras que el menor de edad los acompañaba en calidad de aprendiz y chofer, con el deseo de poder convertirse en trailero y así ayudar a su madre con los gastos de la casa.
Lo último que se supo de ellos es que el pasado 7 de mayo salieron rumbo a la comunidad de Palo Mulato, Huimanguillo, a donde fueron requeridos para reparar un tráiler. La última comunicación se registró a las 14:35 horas desde una gasolinera cercana a su destino.
De acuerdo con información extraoficial, los cuerpos fueron localizados aún con humo, con signos de tortura y lesiones por impactos de bala.
En días anteriores, familiares acusaron lentitud y negligencia por parte de la FGE.
La semana pasada, protestaron frente a esa dependencia y el lunes 12 de mayo, la desesperación llevó a familiares y amigos a bloquear la Avenida Usumacinta frente a las instalaciones de la Fiscalía en Villahermosa, exigiendo justicia y una búsqueda exhaustiva.
“La Fiscalía no ha hecho nada, ni siquiera han pedido apoyo a la Guardia Nacional. Es un niño con sueños de ser trailero, no merecemos esta indiferencia”, dijo Amalia Córdova, madre del joven Nelson, con la voz quebrada.
Los manifestantes señalaron la inacción de las autoridades en una zona conocida por la presencia de la delincuencia, un factor que agudizó su angustia.
La presión ejercida por las familias, tras 144 horas de espera, finalmente obligó al Fiscal General del Estado, Oscar Tonathiu Vázquez Landeros, a organizar una caravana de búsqueda que incluyó al Ejército, la Guardia Nacional y policías ministeriales.
“Tenemos fe de encontrarlos vivos, pero la pereza de la Fiscalía nos está matando”, expresó el pasado lunes Rodolfo Morales, cuñado de Juan Cordero.
El caso se suma a una crisis de seguridad en Tabasco, donde las desapariciones aumentaron un 100 por ciento entre noviembre de 2024 y marzo de 2025, al pasar de mil 338 a 2 mil 718 víctimas.
Las declaraciones recientes del Gobernador morenista Javier May, quien afirmó la semana pasada “vamos bien”, contrastan con la realidad de éste y otros crímenes, mientras el Secretario de Gobierno, José Ramiro López Obrador, minimizó las ejecuciones con un “Ya bájenle”, ante cuestionamiento de periodistas sobre asesinatos el 8 de mayo.