Descubre por qué aparece el sarpullido por calor, cómo prevenirlo y tratarlo eficazmente para mantener tu piel saludable.
¡Las altas temperaturas no dan tregua! Si empiezas a notar ronchitas o malestar en la piel, ¡cuidado! Quizá es sarpullido por calor, una afección frecuente en bebés y adultos, te contamos los cuidados y cómo prevenirlo.
Debido a la ola de calor que está sucediendo en todo México, es probable que nos enfrentemos a problemas en la dermis y, aunque generalmente no es grave, pueden causar molestias significativas.
Comprender sus causas, reconocer sus síntomas y aplicar medidas preventivas y tratamientos adecuados es esencial para mantener la salud de la piel durante los meses más calurosos.
Esto es aún más apremiante en los bebés, cuya piel es extremadamente delicada y sensible durante sus primeros meses de vida. El sarpullido por calor, también conocido como miliaria o “sudamina”, puede causar incomodidad en los más pequeños, haciendo que se sientan irritables y molestos.
Si bien en la mayoría de los casos se resuelve con cuidados básicos, es importante estar atentos a signos de complicaciones y consultar a un profesional de la salud cuando sea necesario.
¿Por qué aparece el sarpullido por calor?
El sarpullido por calor se produce cuando los conductos sudoríparos se obstruyen, atrapando el sudor debajo de la piel. Esto provoca inflamación y la aparición de pequeñas protuberancias rojas o ampollas que pueden causar picazón o una sensación de escozor.
También el ejercicio en ambientes calurosos puede provocar sudoración excesiva; así como usar ropa ajustada o sintética.
Es importante que no es lo mismo que la urticaria por calor, por lo mismo, siempre es recomendable acudir a un especialista para un diagnóstico certero.
¿Por qué el sarpullido por calor afecta más a los bebés?
Los bebés son un grupo de personas a los que más afecta el sarpullido por calor o miliaria debido a que tienen una piel más delgada y menos desarrollada en comparación con los adultos.
Sus glándulas sudoríparas todavía están en formación y son más propensas a bloquearse; también suelen tener varias capas de ropa para que no “se enfríen”, lo que resulta contraproducente, pues impide que el calor corporal se disipe.
De igual forma, los bebés que pasan mucho tiempo acostados, en brazos o en cochecitos, pueden desarrollar sarpullido en las zonas de contacto y fricción (espalda, cuello, ingles).
De acuerdo con la UC San Diego, el sarpullido por calor en los bebés se manifiesta con pequeños bultos rojos en su piel, casi siempre apareciendo en el cuello, glúteos y pliegues donde hay mayor fricción.
Otros grupos propensos al sarpullido por calor:
- Personas mayores: la piel envejecida puede tener una menor capacidad para regular la temperatura y el sudor.
- Personas con sobrepeso: tienen más pliegues cutáneos donde puede acumularse el sudor.
Tipos de sarpullido por calor y cómo identificarlos:
- Miliaria cristalina: pequeñas ampollas transparentes sin inflamación, generalmente indolora y sin picazón.
- Miliaria rubra: protuberancias rojas acompañadas de picazón o escozor, con inflamación y sensación de ardor.
- Miliaria pustulosa: protuberancias rojas con pus; causan inflamación, dolor y posible infección.
- Miliaria profunda: protuberancias de color piel que se desarrollan en la dermis, dan una sensación de calor y sudoración reducida.
¿Cómo prevenir el sarpullido por calor en bebés (y adultos)?
- Usa (o coloca en los bebés) ropa ligera, holgada, transpirable y de fibras naturales como el algodón.
- Evita telas sintéticas, ya que retienen el calor y la humedad.
- Usa toallitas suaves sin alcohol ni fragancias irritantes.
- En bebés, cambia los pañales con frecuencia y asegúrate de que el área esté completamente seca antes de colocar uno nuevo.
- Deja al bebé sin ropa por algunos minutos al día para que su piel respire.
- Siempre que sea posible, mantén al bebé en un lugar fresco y con buena circulación de aire.
- Si estás en exteriores, busca sombra y evita salir durante las horas más calurosas del día (entre las 11:00 y 16:00).
- Usa sombrillas, gorritos ligeros y mantas transpirables para protegerte (y al bebé) del sol.
- Un baño diario con agua tibia (no caliente) ayuda a limpiar el sudor y refrescar la piel del bebé.
- No es necesario usar jabón todos los días, y cuando se utilice debe ser uno hipoalergénico y sin fragancias.
- Después del baño, se puede aplicar una crema ligera sin aceites minerales ni lanolina, preferiblemente recomendada por un pediatra o dermatólogo.
- Evita aplicar productos oleosos o cremas densas, ya que pueden obstruir los poros y empeorar el problema.
Tratamientos para el sarpullido por calor
En la mayoría de los casos, el sarpullido por calor desaparece por sí solo una vez que la piel se enfría y se mantiene seca. Sin embargo, existen tratamientos que pueden acelerar la recuperación y aliviar los síntomas.
Se trata de cremas y lociones que sueles encontrar en el súper, bajo la etiqueta de dermocosméticos o dermatológicos.
Y, por lo general, las cremas y productos para bebés suele protege, calmar y aliviar la piel de los más pequeños, muchas veces funcionando también en adultos.
Pero siempre busca atención médica especializada antes de comenzar cualquier tipo de tratamiento contra el sarpullido y no te autodiagnostiques.
POR: EXCELSIOR