En el primer capítulo de la Final del Clausura 2025
El primer capítulo de la Final quedó a deber y todo se definirá en el Estadio Nemesio Diez.
La que se veía que podría ser una final eléctrica y con mucho espectáculo, no fue así, al menos no en el juego de ida, que fue más un ejercicio de querer y no poder por parte de América y un performance perfecto de Toluca en el plano defensivo. Un 0-0 que en el papel parece beneficiar a los Diablos, pero con el riesgo de que en su casa deberán cambiar de postura, porque lo de la ida fue muy rácano.
La sorpresa llegó minutos antes de que iniciara el juego, cuando Toluca sorprendió con la baja de Paulinho, el delantero portugués y campeón de goleo no apareció en el once ni en la banca por problemas musculares. Una ausencia muy sensible para los Diablos que no podían contar con su hombre más peligroso.
En América, se mantuvo la ausencia de Brian, pero ahí no cambió mucho el equipo de Jardine, porque el brasileño echó mano del mismo cuadro con el que enfrentó en el juego de vuelta a Cruz Azul.
Sin ese poder que aporta Paulinho al ataque, Toluca planteó un juego de corte defensivo, apostó por esperar un error de las Águilas que eran las obligadas a proponer, la tuvo cuando Vega aprovechó un yerro en defensa, proyectó a Morales y éste tiró con derecha, pero Malagón contuvo bien.
Trató América, que tenía la pelota y la iniciativa, pero no encontraba fluidez en campo contrario, porque el bloque bajo de los Diablos estaba muy bien parado, apenas concedía espacios y luego cuando era necesario no tenían reparo en cortar el juego con faltas que cortaban el ritmo.
Lo más cercano de América fue un remate de Borja que los escarlata salvaron sobre la raya, luego un tiro de Fidalgo que García repelió con un buen lance. Sin espacios, el cuadro azulcrema se estrelló una y otra vez, Toluca había aprendido la lección del juego de liga, echó el candado y generó cierta frustración en las Águilas en el primer tiempo.