De manera contrastante al panorama nacional, Coahuila se garantizó una jornada pacífica y ordenada, gracias a la actuación de sus autoridades locales.
En la entidad, en este evento de orden nacional, se dieron las garantías a la sociedad para acudieran a las urnas en paz y, en tranquilidad, de manera libre, demostrándose el imperio de las instituciones del Estado y dejándose en claro que prevalece que en Coahuila se mantiene la confianza ciudadana en las decisiones que toman las autoridades locales.
Mientras tanto, a nivel nacional quedó altamente evidenciado el rechazo creciente a las políticas públicas de la 4T y de Morena, cuyo proyecto enfrenta un desgaste acelerado, marcado por la improvisación, la inseguridad y la falta de legitimidad.
El rechazo social a participar en las urnas para renovar cuadros del Poder Judicial, fue una clara muestra en el país y en el Estado, en que la poca afluencia votó en orden y en libertad.