En sencillas palabras / Néstor J. Hurtado Vera.
En esta ocasión me concentraré en el valioso tema de la seguridad en Coahuila y quise escribir al respecto, porque la semana pasada, fue el Día del Policía Estatal y debido a los buenos resultados, quiero hablar al respecto, porque como decía el expresidente, Enrique Peña Nieto, “lo bueno casi no se cuenta, pero cuenta mucho”, y en este entorno de noticias tan complicadas, desde las internacionales, la inseguridad nacional o la crisis económica por diversos factores, creo que también estamos obligados a resaltar las acciones que se encuentran funcionando.
Como lo hemos señalado en muchas ocasiones, en Coahuila algo se hace diferente, por eso las cosas son distintas a muchas zonas del país como Guerrero, Michoacán, Zacatecas, entre otros lugares que están en una situación muy complicada. Ahora sí que, como decía Albert Einstein, “si se buscan resultados distintos, no puedes hacer las cosas siempre igual”, y en nuestro estado, bajo el liderazgo del gobernador, Manolo Jiménez, hay una estrecha coordinación entre las Fuerzas Estatales con la Marina, con el Ejército Mexicano, con la Guardia Nacional, con las Fiscalías y también con los Ayuntamientos.
Personalmente he sido testigo del buen trabajo estatal, no por nada somos de las entidades más seguras de México, y ojo, no lo digo yo, lo dice INEGI, IMCO y algunas casas encuestadoras de prestigio.
Y como coahuilense me gusta presumirlo, porque para ser un estado fronterizo, se requiere muchísima más preparación, inversión, coordinación y todo lo conducente por tener 512 kilómetros de frontera.
Solo para darnos una idea gráfica, Coahuila tiene de frontera con Texas casi igual que la distancia de Saltillo a Torreón de ida y de vuelta. Comprenderemos que, con tanta frontera, los problemas son más agudos y aun así somos el tercer estado más seguro para vivir en todo México.
Por eso, y en el marco de la semana de la Policía Estatal, quiero agradecer y felicitar a todos los elementos que, con sus vidas, luchan diariamente para que nuestro estado cuente con paz social y con ello tengamos una buena economía.
Porque ese es otro tema, pero con el efecto “Donald Trump” y con la ansiedad económica y financiera que vivimos y en donde cada vez menos empresas llegan a instalarse a México, hay que decir con orgullo que, gracias a la seguridad, las marcas que invierten o reinvierten, prefieren hacerlo en Coahuila.
En fin, mi total reconocimiento al señor gobernador, Manolo Jiménez, al Fiscal General de Coahuila, Federico Fernández, al secretario de seguridad, Hugo Gutiérrez, al señor subsecretario, Héctor Flores, y a todos y cada uno de los elementos estatales que hacen posible esta realidad de paz y trabajo.
Sonará muy duro, pero llegar a este punto en donde todo es positivo, ha costado muchas vidas y es en estos momentos cuando tenemos que detenernos tantito, reflexionar, reconocer y aprender de nuestro pasado, ya que bien dicen, que; “quien no conoce su historia, está condenado a repetirla”.
Ante ello, creo indispensable que a nuestras nuevas generaciones, les expliquemos que hace más de una década la cosa en Coahuila no estuvo nada bonita y por eso tenemos que valorar enormemente la seguridad y sobre todo seguirla procurando.