Medida afecta a ciudadanos de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela protegidos por un programa de la era Biden
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) comunicará este jueves a cientos de miles de inmigrantes que su permiso para vivir y trabajar en Estados Unidos ha sido revocado y que deben abandonar el país, informa la cadena estadounidense CNN, que obtuvo copia de la notificación.
El aviso de rescisión está dirigido a los nacionales de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela que llegaron a Estados Unidos a través de un parole humanitario durante la administración de Joe Biden.
Más de medio millón de personas de esos cuatro países se beneficiaron del parole, aunque no está claro cuántos han buscado desde entonces otras formas de alivio migratorio durante su estancia en Estados Unidos.
Aviso a migrantes sobre revocación de permisos llegaría por correo
El aviso, según el DHS, se envía a las direcciones de correo electrónico proporcionadas por los participantes en el programa.
“Este aviso le informa de que su programa de parole humanitario ha terminado”, dice el aviso. “Si usted no se va, puede estar sujeto a medidas de aplicación de la ley, incluyendo pero no limitado a la detención y expulsión, sin la oportunidad de hacer arreglos personales y regresar a su país de una manera ordenada”, señala la notificación obtenida por CNN.
El aviso también indica que los permisos de trabajo vinculados al programa serán revocados y ordena a las personas en libertad condicional que devuelvan esos permisos a los Servicios de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos.
El presidente estadounidense, Donald Trump, aseguró hoy en su red, Truth Social, que “hice campaña y recibí un mandato histórico para el mayor programa de deportación masiva de la historia de Estados Unidos. Las encuestas muestran un apoyo público abrumador para sacar a los ilegales, y eso es exactamente lo que haremos”.
Redadas migratorias desatan protestas en EU
La notificación, de confirmarse, sería la más reciente medida de la política antiinmigrante de la administración actual, que ha llevado una serie de redadas en trabajos, escuelas y hospitales, en busca de indocumentados e incluso tiene una campaña titulada: “Denuncia al invasor extranjero”.
Las redadas han desatado una ola de protestas en distintos puntos del país, comenzando por Los Ángeles, adonde Trump envió, pese al rechazo del gobernador de California, Gavin Newsom, a miles de elementos de la Guardia Nacional y 700 Marines para controlar la situación.
Trump alega que sin su ayuda, Los Ángeles sería “una escena del crimen como no hemos visto en años”.
Por El Universal