La especialista Karla Zacarías expresó que las personas adultas tienen la libertad de vivir la sexualidad como les plazca, pero en el caso de niños o adolescentes no se les debe cambiar el género
Gloria Jaramillo
LA PRENSA
La Psicóloga Karla Zacarías manifestó que la forma en que las personas viven su sexualidad es una decisión personal, pero advirtió que en el caso de niños o adolescentes no se les debe motivar a que elijan su género –hombre o mujer- porque carecen de madurez y consciencia suficiente para tomar postura de esa naturaleza.
“Cuando hablamos de sexo nos referimos al género hombre o mujer, femenino o masculino, y cuando hablamos de sexualidad es cómo las personas viven su sexo”, expresó la especialista.
Dijo que la homosexualidad no está considerada como enfermedad mental, trastorno mental, ni es tema emocional. Tampoco es una condición médica que requiera tratamiento o cura, es una decisión propia de cada persona.
“No está considerado un problema emocional, porque no implica una predisposición a la angustia emocional o a los problemas psicológicos”, afirmó.
Señaló que la orientación sexual probablemente sea el resultado de una combinación entre factores biológicos, psicológicos o ambientales, pero no es una elección consciente ni un defecto.
Hoy es más común ver a más personas en la calle que en otros tiempos, sin embargo eso no significa que esta decisión no se viera antes, pero el día de hoy se observa más libertad para expresar la sexualidad, expresó.
“Es importante considerar que cuando la persona decide llevar su sexualidad, es sano que las personas lo decidan cuando ya tienen una experiencia de vida. No es sano definir un sexo diferente cuando las personas son menores de edad o niños, porque no tienen una experiencia de vida”, agregó Zacarías.
Dijo que desgraciadamente los medios de comunicación manejan la homosexualidad como un concepto muy libre para todas las edades, “pero no es sano, porque el niño o la niña el día de hoy se asuma como homosexual, porque no tiene experiencia de vida, madurez mental, ni conciencia, tampoco un adolescente, no está definido acerca de cómo llevar su sexualidad”, indicó.