Todo comenzó con una vuelta en la plaza. Ese gesto sencillo, tan tradicional en Parras de la Fuente, se convirtió en el inicio de una historia que la semana pasada cumplió 49 años de amor, entrega, lucha y complicidad. Chachis Alejo Marines y Charlie López Pérez celebran casi medio siglo de caminar juntos, y lo hacen agradeciendo a la vida, a Dios y al destino por unir sus caminos y sostenerlos en los días buenos… y sobre todo en los difíciles.
No todas las historias de amor se cuentan con palabras; muchas se viven con hechos, con miradas, con silencios compartidos y con recuerdos que se abrazan fuerte. Así es la historia de Chachis y Charlie, una pareja profundamente querida en la comunidad de Parras, que hoy conmemora 49 años de matrimonio, de esos que se celebran con el alma, no solo con una fecha.
Chachis, reconocida por su fuerza, su espíritu emprendedor y su amor por esta tierra vinícola, no solo ha sido una impulsora del vino parrense, sino también un pilar en su hogar. Agradecida, rememora con emoción esos instantes que marcaron su historia:
“Gracias por esa vuelta en la Plaza que cambió mi vida. Por enseñarme a disfrutar la comida de los pueblitos, por compartir tantas alegrías, y también por quedarte, firme, en los momentos más oscuros y trágicos”.
Porque la vida, como bien lo dicen, trae de todo: alegrías, pruebas, desafíos. Pero lo importante es tener con quién enfrentarlo. Y Chachis y Charlie han sido ejemplo de eso: de mantenerse unidos incluso cuando duele, cuando parece que no hay fuerzas, pero el amor es más fuerte.
Juntos han formado una familia sólida, y su mayor orgullo es su hija Karla Giovanna, quien ha crecido viendo el ejemplo de dos seres humanos que se apoyan, se respetan y se enseñan cada día. Charlie ha sido no solo esposo, sino guía, maestro de vida y compañero fiel.
Y en medio de esta celebración, una sorpresa los emociona aún más: su ahijado Víctor Castro les regaló una canción romántica compuesta a partir del texto que Chachis escribió, palabras que nacieron del corazón y que ahora viven también en melodía.
“Mucho que agradece a Dios por ponerte en mi camino por aquella vuelta en la plaza que marcó todo nuestro destino desde entonces paso a paso construyendo una vida compartida un amor que sigue creciendo gracias”.
Hoy, con el corazón lleno de gratitud, Chachis lo dice con firmeza: “Gracias, gracias, gracias, Charlie López… vayamos por más, porque te amo”.
Y en cada rincón de Parras, este aniversario se siente como una lección de amor verdadero, de compromiso duradero y de esperanza. Porque cuando se ama así, no hay tiempo que alcance para celebrarlo.