Bautizado como 3I/ATLAS, el cuerpo celeste será visible para los telescopios de la Tierra hasta septiembre y se espera que lo sea otra vez en diciembre
Por tercera ocasión desde que se tiene registro, un cometa ajeno al Sistema Solar está de paso por el mismo. Si bien fue descubierto por uno de los telescopios de sondeo de ATLAS, que es llamado así por su sigla en inglés para Sistema de Última Alerta de Impacto Terrestre de Asteroides, no hay peligro de colisión con la Tierra.
El primer avistamiento ocurrió el 1° de julio pasado en el telescopio ubicado en Río Hurtado, Chile, que es uno de los cuatro que forman parte de ATLAS (hay otros dos en las islas hawaianas, ya que el sistema fue desarrollado por la Universidad de Hawái y financiado por la NASA, y uno más en Sudáfrica.
“Procedente de la constelación de Sagitario, el cometa interestelar ha sido bautizado oficialmente como 3I/ATLAS. Actualmente se encuentra a unos 670 millones de kilómetros de distancia”, informa la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio de Estados Unidos (NASA).
No es una amenaza
Según el informe de la NASA, el cometa no representa una amenaza para la Tierra y no se acercará a nuestro planeta a más de una distancia de al menos 1.6 unidades astronómicas o alrededor de 240 millones de kilómetros (una unidad astronómica es equivalente a la distancia promedio entre la Tierra y el Sol).
Actualmente 3I/ATLAS se encuentra a unas 4.5 ua (unos 670 millones de kilómetros) del Sol y “alcanzará su punto más cercano al Sol alrededor del 30 de octubre, a una distancia de 210 millones de km, entre las órbitas de Marte y la Tierra. Sin embargo, en ese momento la Tierra se encontrará del otro lado del Sol; de hecho, 3I/ATLAS será visible para los telescopios terrestres hasta septiembre, después de eso estará demasiado cerca del Sol como para ser observado.
Desde hace unos días y hasta ese momento, astrónomos de todo el mundo están investigando todo lo que pueden pueden sobre las propiedades físicas del cometa interestelar. “Se espera que reaparezca en la cara opuesta del Sol a principios de diciembre, lo que permitirá reanudar las observaciones”, concluye el comunicado.
POR: LATINUS