Directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard, presenta informe de supuesta conspiración para relacionar a Trump con Rusia y deslegitimar su victoria en 2016
Washington. El gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, redobló este miércoles sus ataques contra el exmandatario Barack Obama (2009-2017) y presentó lo que llamó “evidencia irrefutable” de que el demócrata “conspiró” para relacionar a Trump con Rusia y deslegitimar su victoria en 2016.
El reporte, redactado por el Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes en 2020, hace una revisión sobre la supuesta injerencia rusa en las elecciones presidenciales, en lo que la directora de Inteligencia Nacional de Estados Unidos, Tulsi Gabbard, considera una prueba de la “conspiración” de la Administración de Obama contra Trump.
Gabbard insistió en una rueda de prensa en la Casa Blanca que esta es una evidencia “irrefutable” de que Obama y su equipo de Seguridad Nacional mintieron a la población al promover la narrativa de que el presidente ruso, Vladimir Putin, favorecía al republicano en esos comicios, en los que Moscú habría intentado interferir.
“Existe evidencia irrefutable que detalla cómo el presidente Obama y su equipo dirigieron la creación de una evaluación de la comunidad de inteligencia a sabiendas de su falsedad. Sabían que promovería esta narrativa artificial de que Rusia interfirió en las elecciones de 2016 para ayudar al presidente Trump a ganar”, indicó.
Según la directora de Inteligencia estadounidense, se “fabricaron hallazgos a partir de fuentes de mala calidad, suprimieron pruebas e inteligencia creíble que refutaba sus falsas afirmaciones”.
“Al hacerlo, conspiraron para subvertir la voluntad del pueblo estadounidense que eligió a Donald Trump en esas elecciones”, dijo Gabbard, que ya había revelado una primera colección de documentos desclasificados la semana pasada, cuando hizo un llamado a procesar a los funcionarios de la administración del demócrata.
La titular cargó también contra la exsecretaria de Estado Hillary Clinton, el exdirector de Inteligencia Nacional James Clapper y el exdirector del FBI James Comey, supuestos cómplices en lo que llamó el “bulo de Rusia”.
Afirmó que Rusia tenía información sobre Clinton, que era la entonces candidata presidencial demócrata, “incluyendo posibles actos cr1minales, como reuniones secretas con múltiples organizaciones religiosas”, así como “incrementos significativos en el financiamiento, por parte del Departamento de Estado, a su campaña”.
Obama tachó de “ridículas” las acusaciones en su contra y un “débil intento de desviar la atención” del escándalo del financista Jeffrey Epstein, quien se quitó la vida en prisión en 2019, y se ha convertido en un dolor de cabeza para Trump, cuyo gobierno ahora afirma que no hay nada más que revelar sobre el caso, tras haber repetido por años que tenía una “Lista de cl1entes” que divulgaría.
Ahora, muchos en la base MAGA de Trump lo acusan de ocultar información.
POR: EL UNIVERSAL