Viñedos, paisajes desérticos y recintos exclusivos han convertido al Pueblo Mágico en destino clave del turismo nupcial para parejas que buscan experiencias únicas
Alonso Crisante
LA PRENSA
CUATRO CIÉNEGAS, COAHUILA.– En medio de sus paisajes desérticos, viñedos y campos de lavanda, el Pueblo Mágico de Cuatro Ciénegas vive un auge sin precedentes como destino para bodas, consolidándose como uno de los puntos más atractivos del norte del país para celebrar este tipo de eventos. La belleza natural, la tranquilidad del entorno y la reciente apertura de recintos especializados han despertado un notable interés, principalmente entre parejas originarias de Monterrey.
Según datos de la Oficina de Convenciones y Visitantes (OCV) de la Región Centro de Coahuila, al menos 30 bodas están ya programadas en uno de los nuevos complejos turísticos de la localidad para lo que resta del año. Este complejo cuenta con seis habitaciones de hospedaje y un salón de eventos con vistas panorámicas a los viñedos y a los cultivos de romero y lavanda, lo que lo ha convertido en un punto clave dentro de la creciente oferta del municipio.
“Este auge no sólo posiciona a Cuatro Ciénegas como un lugar deseado para casarse, sino que además genera una derrama económica muy importante para todo el pueblo”, explicó Enrique Ayala Quintanilla, presidente de la OCV. Restaurantes, hoteles, proveedores de flores, fotografía y transporte han visto incrementada su actividad gracias a la llegada constante de visitantes que asisten a estos eventos.
Entre los sitios más solicitados para las ceremonias destacan las emblemáticas Minas de Mármol, cuyo paisaje ha sido escenario de múltiples sesiones fotográficas y enlaces civiles o simbólicos, atrayendo también a familias binacionales que celebran en México por motivos sentimentales, logísticos o migratorios.
Ayala Quintanilla detalló que el crecimiento del turismo de romance ha sido resultado de una estrategia de promoción específica para el segmento de bodas de destino, la cual busca aprovechar los atributos naturales y arquitectónicos del municipio. “Las parejas quieren algo distinto, un lugar que ofrezca un ambiente íntimo, natural y exclusivo. Cuatro Ciénegas tiene todo eso”, añadió.
La mayoría de los enlaces que se están celebrando en la zona tienen como origen el área metropolitana de Monterrey, donde se ha detectado una creciente demanda por destinos cercanos, pero con experiencias únicas. En este sentido, Cuatro Ciénegas ha logrado capturar la atención no solo por su cercanía geográfica, sino por el encanto que ofrece a nivel visual y emocional.