Juez Penal concede 144 horas a defensa de Elian “N” para que presente pruebas de su supuesta inocencia
Alexis Massieu
La Prensa
Para ser acusado del homicidio calificado de Luis Fernando Escobedo Castillo, un castañense llamado Elian “N”, fue llevado el día de ayer ante un juez penal, quien le concedió las 144 horas que contempla la Constitución, para que pueda presentar pruebas de su inocencia. Siendo ese el motivo, por el que la audiencia se suspendió, y será hasta el próximo viernes que se decida si lo vinculan o no a proceso.
Fue en la sala tres del Centro de Justicia Penal localizado en Ciudad Frontera, donde se dio inicio por parte del Juez Penal Nelson Ulises Herrera, a los trámites legales de la causa 746/2025.
De acuerdo a la investigación hecha por la Fiscalía General del Estado, a Elian “N”, lo detuvieron elementos de la Policía Municipal, momentos después de haber herido en dos ocasiones con una navaja, a Luis Fernando Escobedo, con base al señalamiento que les hizo quien era su novia.
En su informe, los agentes preventivos señalaron que eran aproximadamente las 01:25 horas, cuando recibieron un reporte de riña en el que se indicaba que había una persona lesionada con arma blanca, sobre la calle Jesús María Rangel, en la colonia Independencia Norte.
Al llegar, observaron a un grupo de personas que se encontraban alrededor de un vehículo Nissan, Sentra de color gris, y a sus pasajeros haciéndoles señas para que se acercaran. Descubriendo que en el asiento trasero, atrás del conductor, estaba una persona sangrando del torso.
Siendo la novia de la víctima, de nombre Dora Elia, quien les señaló que el responsable era Elian “N”, procedi9endo los municipales a detenerlo, sin que al momento de la revisión le pudieran encontrar el arma.
Tras escuchar cuáles eran los cargos en su contra, el juez le dio la oportunidad a Elian “N”, de rendir una declaración, sin embargo, por consejo de su abogada particular decidió guardar silencio.
Fue entonces que el acusado le solicitó al juez, la duplicidad del término constitucional de 72 horas, para poder preparar su defensa, de tal forma, que se señaló como fecha para que se lleve a cabo la segunda parte de la audiencia inicial, la del próximo viernes 15 de agosto a las 09:00 horas, fecha en la que se decidirá si lo vinculan o no a proceso.
Mientras tanto, Elian “N” permanecerá detenido en las celdas del C4, ya que según se explicó en la audiencia, el homicidio doloso es uno de los delitos que implican la imposición de la medida cautelar de la prisión preventiva de manera oficiosa, lo cual también se justificó por parte del abogado de la FGE, al acreditar que hubo agresiones previas, y amenazas por parte del acusado y sus familiares, a quienes ahora son testigos del crimen.
QUISO SEPARARLOS
Según se lo indico el Ministerio Público al juez, Luis Fernando Escobedo Castillo, llevó a su novia hasta la casa de sus papás, cuando ella se enteró que sus vecinos estaban apedreando el domicilio, arribando a bordo de su automóvil Nissan Sentra de color gris.
Fu al intentar separar a los rijosos, que—supuestamente–Elian “N”, usando una navaja plegable con cachas de color naranja, lo hirió en dos ocasiones, siendo una de las lesiones tan profunda que le llegó al corazón.
En un intento por ir al hospital, Luis Fernando trató de ponerse al volante de su coche, pero se cayó, y fue entonces que lo subieron en la parte trasera de su automóvil para llevarlo a recibir atención médica. Sin embargo, quienes trataban de ayudarlo no sabían manejar un coche estándar.
Respecto de la versión preliminar, de que los atacantes, o el propio acusado, le poncharon los neumáticos al Nissan Sentra, para que no pudieran llevara al afectado al hospital, nada se dijo durante la primera parte de la audiencia inicial.
Si bien, al ser revisado por los policías municipales, se descartó que Elian “N” trajera consigo ninguna navaja, los testigos indicaron que lo vieron entrar al domicilio de sus papás, donde momentos después, en la concina, se halló el arma con mango de color naranja, la cual coincide con las características de las heridas, y estaba manchada de sangre, del mismo grupo sanguíneo al que pertenecía la víctima.