Dr. Humberto Falcón Villarreal
Ya se acerca el inicio de clases,los cursos, los preparativos de bienvenida a los alumnos(as), las presentaciones y nuestras escuelas se volverán a llenar de voces y risas. ¡Con las pilas recargadas y el corazón dispuesto! Así es como iniciamos los trabajadores de la educación este nuevo ciclo escolar 2025-2026, con la energía renovada, con el compromiso firme y la convicción de que cada día en el aula y en la escuela, es una oportunidad para transformar vidas.
Porque todos los trabajadores y trabajadoras de la educaciòn, tenemos en nuestras manos una misión tan importante como delicada: transformar vidas mediante el conocimiento, el desarrollo de habilidades, la socialización y el aprendizaje. Cada día en nuestras instituciones educativas (de cualquier nivel) es una oportunidad para sembrar esperanza, formar ciudadanos y construir un mejor futuro. Después de un merecido receso escolar, una mente descansada y un corazón dispuesto, son los ingredientes para un gran ciclo.
El descanso no es un lujo, es una necesidad. Después de un ciclo de trabajo intenso, como un año escolar o un periodo laboral prolongado, el cuerpo y la mente requieren una pausa para recuperarse, recargar energía y renovar el entusiasmo.
Descansar y desconectarte de tu trabajo diario permite: a)- Restablecer el equilibrio físico y emocional, b)- Reducir el estrés y prevenir el agotamiento profesional, c)- Mejorar la salud mental y física, d)-Recuperar la creatividad y la motivación, e)-Reflexionar sobre lo aprendido y planear con claridad lo que viene. Numerosos estudios comprueban que cuando a un profesional se le permite descansar, regresa más enfocado, más creativo y con una mejor actitud para enfrentar nuevos retos.
Por eso, el descanso es también parte del trabajo bien hecho. ¿Qué pasa con un trabajador(a) agotado(a) o agobiado(a)? Un docente o personal educativo en estado de agotamiento físico y emocional puede experimentar: Pérdida de motivación y entusiasmo, lo que antes era vocación se vuelve rutina, y el gusto por enseñar y servir disminuye.
Disminución del rendimiento y la creatividad, porque la fatiga afecta la capacidad de planear, innovar y resolver problemas.
Mayor irritabilidad y estrés, esto puede dañar la convivencia escolar y afectar la relación con estudiantes, padres y madres de familia y en general con el personal de la institución.
Problemas de salud física y mental, Dolores de cabeza, insomnio, ansiedad, depresión o enfermedades por estrés se vuelven frecuentes.
Desconexión emocional con su labor, El trabajador o trabajadora de la educaciòn, deja de sentirse parte activa y valiosa del proceso educativo.
Riesgo de cometer errores o tomar decisiones impulsivas, ya que el cansancio crónico, puede nublar el juicio y aumentar el riesgo de conflictos o fallas. Por eso no podemos dejar de mencionar que existen muchas ventajas cuando un trabajador o trabajadora de la educaciòn ha disfrutado de un receso escolar y/o vacaciones:
*Mayor motivación y entusiasmo en la escuela, ya que el descanso permite regresar con energía y actitud positiva. *Planeaciones más creativas y efectivas, ya que una mente descansada, favorece la innovación pedagógica y mejora la calidad de tu trabajo.
*Mejor ambiente escolar, ya que el personal y docentes motivados, crean un entorno más colaborativo. *Fortalecimiento del vínculo con los alumnos, padres de familia y compañeros(as), eliniciar con entusiasmo, permite conectar mejor con todos desde el primer día. *Actitud resiliente ante los retos del ciclo escolar, ya que con energía renovada, los desafíos se enfrentan con más calma y determinación.
*Inspiración para toda la comunidad educativa, ya que el ejemplo de personas comprometidas y entusiastas motiva a alumnos, padres y docentes. Si a pesar del receso escolar del que has disfrutado como trabajador (a) de la educaciòn, aún vuelves con las pilas descargadas, desmotivado(a) y sin entusiasmo, es momento de detenerte, escucharte, analizar tus gustos y prioridades.
Porque educar con pasión empieza por estar bien contigo mismo.El bienestar no es opcional, es esencial para poder desarrollarte con plenitud. Recuerda: para encender la chispa en otros, primero debes cuidar tu propia luz. Tú, fuiste, eres o serás, el resultado del caminar por alguna(s) institución educativa… ¿Qué has hecho?, ¿que haces? o ¿que puedes hacer, para que estas instituciones sean cada vez mejores?