El síndrome de ovario poliquístico (SOP) es una condición hormonal frecuente que afecta a las mujeres en edad reproductiva.
Aunque suele manifestarse desde la adolescencia, muchas mujeres no reciben un diagnóstico inmediato, ya que los síntomas pueden desarrollarse gradualmente o confundirse con otras afecciones.
¿Qué es el síndrome de ovario poliquístico (SOP)?
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el SOP se caracteriza por desequilibrios hormonales que pueden alterar el ciclo menstrual, la ovulación y los niveles de andrógenos (hormonas masculinas presentes también en las mujeres en menor cantidad).
Se indica que el SOP se produce cuando los ovarios generan un exceso de hormonas androgénicas, lo que puede interferir con la liberación regular de óvulos (ovulación).
Esto provoca una variedad de síntomas que pueden afectar la salud física y emocional de quienes lo padecen.
Principales síntomas del SOP
El SOP no se presenta igual en todas las personas. De hecho, los síntomas pueden cambiar con el tiempo e incluso fluctuar sin un desencadenante claro. Entre los más comunes, según la OMS y la Cleveland Clinic, se incluyen:
Menstruaciones irregulares o ausentes: Los ciclos menstruales pueden ser largos, muy abundantes o desaparecer durante varios meses.
- Crecimiento excesivo de vello (hirsutismo): Puede aparecer vello grueso y oscuro en la cara, el pecho, el abdomen o la espalda.
- Acné persistente: A menudo severo, especialmente en rostro, pecho y espalda, y puede continuar después de la adolescencia.
- Aumento de peso u obesidad: Muchas personas con SOP tienen dificultades para perder peso debido a la resistencia a la insulina.
- Manchas oscuras en la piel (acantosis nigricans): Aparecen comúnmente en el cuello, axilas, entrepierna o debajo de los senos.
- Quistes ováricos: En las ecografías, los ovarios pueden aparecer agrandados o con múltiples folículos pequeños.
- Acrocordones (piel colgante): Pequeños pliegues de piel, especialmente en el cuello y axilas.
- Caída del cabello: Similar al patrón de calvicie masculina.
- Infertilidad: El SOP puede dificultar la ovulación regular, lo que complica la concepción natural.
¿Cuántas mujeres viven con SOP?
Se estima que entre el 6% y el 13% de las mujeres en edad fértil padecen SOP, pero hasta el 70% de los casos no están diagnosticados, según datos de la OMS.
Esta falta de diagnóstico se debe a la diversidad de síntomas y a la normalización de algunos de ellos, como los periodos irregulares o el acné.
¿Cuándo acudir al médico?
Es fundamental buscar atención médica si presentas alguno de los siguientes signos:
- Periodos menstruales irregulares o ausentes.
- Problemas para quedar embarazada.
- Síntomas de exceso de andrógenos como acné, caída del cabello o vello corporal excesivo.
Se señala que estos síntomas pueden ser indicios de SOP u otros trastornos hormonales que requieren atención especializada.
Diagnóstico del síndrome de ovario poliquístico
No existe una única prueba para diagnosticar el SOP. Por lo general, el proceso incluye:
1. Evaluación clínica
- Historia médica y menstrual: El médico analizará la frecuencia de tus ciclos menstruales y otros síntomas.
- Examen físico: Incluye un examen pélvico para revisar posibles anomalías en los ovarios o el útero.
2. Análisis de sangre
Estos exámenes permiten evaluar:
- Niveles de andrógenos (como la testosterona).
- Hormona foliculoestimulante (FSH).
- Hormona luteinizante (LH).
- Estrógenos y progesterona.
- Niveles de insulina y glucosa (para detectar resistencia a la insulina).
3. Ecografía transvaginal
Permite observar el tamaño de los ovarios y detectar la presencia de múltiples folículos pequeños.
Para confirmar el diagnóstico, los médicos suelen seguir los criterios de Rotterdam, que requieren al menos dos de los siguientes:
- Menstruaciones irregulares o ausentes.
- Evidencia de exceso de andrógenos (clínica o en análisis).
- Ovarios poliquísticos visibles por ecografía.
Tratamiento del SOP
Aunque el SOP no tiene cura, sus síntomas pueden ser controlados eficazmente con un enfoque multidisciplinario que incluya cambios en el estilo de vida, medicamentos y apoyo médico.
1. Cambios en el estilo de vida
- Alimentación saludable: Una dieta equilibrada, rica en fibra, baja en azúcares refinados y grasas saturadas puede ayudar a controlar el peso y mejorar la resistencia a la insulina.
- Ejercicio regular: Actividades como caminar, nadar o practicar yoga ayudan a regular las hormonas y a mantener un peso saludable.
2. Medicamentos
- Anticonceptivos hormonales: Regulan el ciclo menstrual, reducen el acné y el hirsutismo.
- Metformina: Utilizada comúnmente para tratar la resistencia a la insulina.
- Antiandrógenos: Como la espironolactona, para controlar el crecimiento excesivo de vello y el acné.
- Tratamientos para la fertilidad: Clomifeno, letrozol o incluso tratamientos de reproducción asistida como la fecundación in vitro (FIV).
En algunos casos, se considera la cirugía ovárica laparoscópica (drilling ovárico), que puede inducir la ovulación en mujeres que no responden a otros tratamientos.
El síndrome de ovario poliquístico es una condición que requiere atención, información y acompañamiento médico.
Aunque sus síntomas pueden variar de una persona a otra, identificar señales como menstruaciones irregulares, acné persistente, aumento de vello corporal o dificultades para concebir puede marcar la diferencia entre vivir con incertidumbre o recibir un tratamiento efectivo.
Consultar con un especialista, realizar chequeos regulares y adoptar hábitos saludables son acciones clave para tomar el control de tu salud hormonal.
Por EXCELSIOR