La nueva Suprema Corte de Justicia tardó más de cuatro horas en resolver solo tres asuntos de su agenda, evidenciando la falta de ritmo en su debut
Por Jorge Ricardo/Agencia Reforma
La Prensa
CD. DE MÉXICO.- En las primeras dos horas y media de sesión y un solo asunto discutido, al Ministro Presidente, Hugo Aguilar, lo salvó el Secretario de Acuerdos.
Aguilar creyó que con la primera votación de cuatro contra tres quedaba salvado el primer caso de la nueva Corte, una acción de inconstitucional de la CNDH contra cambios a las leyes de salud mental de Chihuahua que no fueron consultados.
El Secretario de Acuerdos, Rafael Coello Cetina, en el puesto desde 2009, le indicó que con las reformas recientes se requerían seis votos para avalar la propuesta: invalidar preceptos y validar otros que no requerían consulta.
El Ministro Presidente corrigió y animó entonces a los cuatro a sumarse a los tres, pero Yasmín Esquivel, autora de la ponencia, le reclamó que sería mejor que la minoría se sumara a los otros cuatro. Eran las 12:25 y, por fin, el primero de los 14 asuntos en la lista del día quedaba aprobado.
A la primera sesión pública en el Salón de Plenos sólo asistió un grupo de estudiantes de Hidalgo. Cansados por el viaje, algunos fueron invitados por el personal de la Corte a no cerrar los ojos.
Como novedad había dos contadores del tiempo electrónicos a cada lado para controlar los argumentos: 10 minutos para la presentación de la ponencia, 7 de cada magistrado, 5 de respuesta del autor de la ponencia, 5 de nuevo para cada Ministro que quisiera preguntar y 3 de respuesta.
“Pues buenos días a todos y a todas, buenos días, ministras y ministros de este nuevo Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Vamos a abrir esta sesión pública. Señor secretario, dé cuenta de los técnicos”, dijo Aguilar dando golpecitos con el martillo de madera, con una bandera mexicana a su derecha y un bastón de mando indígena a su izquierda.
A las 10:13 horas se avaló el acta de la sesión privada del 2 de septiembre y, cuando iniciaron los temas enlistados, algunos de los ministros elegidos por primera vez por voto popular aprovecharon para agradecer y seguir prometiendo.
“Es tiempo de unidad nacional. El ataque gratuito al que no piensa igual que nosotros no nos hace mejores ciudadanos”, comenzó Yasmín Esquivel.
“Estamos ante un arranque histórico en la vida de este Tribunal Constitucional, una etapa que no admite indiferencia porque nos exige una justicia más humana, sensible, cercana a las realidades concretas de todas las personas”, agregó Loretta Ortiz, antes de comentar el asunto de la CNDH y Chihuahua.
Lenia Batres, quien se quedó en el mismo cargo que ya tenía, igual que Esquivel y Ortiz, volvió a enaltecer la reforma judicial , propuesta por Andrés Manuel López Obrador y avalada por Morena.
“Justicia significa imparcialidad, objetividad, Estado de Derecho, certeza política, sujeción a la ley, supremacía constitucional, pero también significa justicia social, derecho a la educación, a la salud, a la vivienda, al trabajo, a un medio ambiente sano, a la cultura, a la ciencia y sus beneficios, al agua, a la alimentación, a la seguridad social”, dijo.
El Ministro Irving Espinosa prometió mirar la realidad “desde quienes históricamente han sido excluidos, marginados y desfavorecidos”.
Arístides Guerrero, el más joven de los nueve nuevos ministros, con 41 años de edad y accidentado hace unas semanas, se conectó por videoconferencia. En su primera participación no debía tocar el fondo del asunto, según el nuevo reglamento, pero no fue reprendido por el Ministro Presidente.
Los ministros agregaron más rondas, ya sin control del tiempo.
Con el retrato de Benito Juárez de fondo, con quien los impulsores de la reforma judicial han querido compararlo, pero por sus raíces indígenas, Aguilar Ortiz se reservó cualquier mensaje para la ocasión.
Con su toga negra, pero bordada con flores de colores, se ha limitado a conducir la sesión, la primera pública y tras el primer tema discutido y analizados, el primero de 15 enlistados, decretó un receso.
Tras 16 minutos de receso, siguió de nuevo la sesion, una hora y cuarto donde se resolvieron otros dos asuntos. Una acción de inconstitucionalidad promovida por el Poder Ejecutivo Federal contra una disposición en la Ley de Educación de Yucatán y una controversia del Municipio de San Pedro Quiatoni, Oaxaca, por la invalidez del reconocimiento de categoría administrativa de una agencia de policía.
La sesión terminó a las 14:13 horas. Cuatro horas en total para tres asuntos menores.
Por lo avanzado el tiempo, son las 2 de la tarde con 13 minutos. Les propongo terminar ahí la sesión del día de hoy y continuar con los temas de agenda en la siguiente sesión. Muchísimas gracias a todos y a todas. Se levanta la sesión”, dijo Aguilar y sonó la madera.