Brenda N. fue golpeada, amarrada y llevada a un pozo para ser enterrada; habitantes del ejido Santa María intervinieron a tiempo y le salvaron la vida
Por: Karla Cortez
LA PRENSA
NUEVA ROSITA, COAHUILA. – Lo que pudo convertirse en un feminicidio fue evitado gracias a la oportuna intervención de vecinos del ejido Santa María, quienes impidieron que un hombre enterrara viva a su expareja después de mantenerla cautiva durante dos días.
La víctima fue identificada como Brenda N., quien acudió el pasado martes al ejido tras recibir un mensaje de su expareja, Víctor Manuel, asegurándole que ahí se encontraba su hija. Al llegar, Brenda descubrió que se trataba de un engaño.
De acuerdo con los primeros reportes, el sujeto la sometió con golpes y la mantuvo amarrada durante dos días dentro de su vivienda. Durante ese tiempo la agredió de manera constante, hasta que el jueves la llevó a empujones hacia un pozo que había cavado con la intención de sepultarla con vida.
En ese momento, vecinos del ejido observaron la agresión y acudieron de inmediato en auxilio de la mujer. Al enfrentarse con el agresor lograron ponerla a salvo, evitando que el ataque culminara en tragedia.
Brenda fue trasladada a un hospital de la localidad, donde recibió atención médica por múltiples golpes y heridas. Su estado de salud se reporta como estable.
Hasta el cierre de esta edición, las autoridades no habían confirmado la detención del presunto responsable, aunque se informó que ya se abrió una carpeta de investigación por varios delitos.
Vecinos de la comunidad señalaron que la mujer ya había sufrido episodios de violencia por parte de su expareja, pero nunca imaginaban que la situación llegara a este extremo.