Huachicol fiscal, la reforma electoral y los choques internos por casos como el de Hernán Bermúdez y la casa de Noroña: Morena corre el riesgo de ‘romperse’ desde adentro
Por Staff/El Financiero
La Prensa
CIUDAD DE MÉXICO.- Morena enfrenta un alto riesgo de “implosión” debido a conflictos internos, a pesar de su insistencia en que no habrá ruptura. La detención de Hernán Bermúdez, exsecretario de Seguridad de Tabasco, ha desatado una crisis en el partido. Bermúdez, vinculado al cártel de “La Barredora” y al exsecretario de Gobernación, Adán Augusto López, es acusado de extorsión y lavado de dinero. Su caso pone a la presidenta Claudia Sheinbaum en una encrucijada, forzándola a elegir entre respaldar a un líder del partido o marcar distancia.
La 4T, en la cuerda floja
Según el columnista de El Financiero, Enrique Quintana, la “continuidad de la 4T no está en el presente en manos de un rival externo”. Los principales riesgos provienen de problemas internos, como la red de contrabando que supuestamente involucra a mandos morenistas y el contraste entre la austeridad oficial y los viajes y lujos de funcionarios como Gerardo Fernández Noroña y Andrés Manuel López Beltrán.
Desafíos legislativos y falta de confianza
Otro punto de discordia es la reforma electoral, que propone reducir el financiamiento público y eliminar escaños plurinominales. Quintana advierte que esta medida podría generar desconfianza y fracturar el bloque oficial. Sumado a esto, las crecientes diferencias entre las bancadas de Morena en el Congreso, lideradas por Ricardo Monreal y Adán Augusto López, podrían llevar a una “parálisis” del movimiento. La suma de estos conflictos podría generar una erosión lenta, minando la confianza de la sociedad, que, según Quintana, puede tolerar errores, pero “no tolera la sensación de impunidad selectiva”. .