El joven de 22 años fue operado de emergencia por graves lesiones internas y trasladado a terapia intensiva, donde permanece en estado crítico pero estable
Por Iván Villarreal
La Prensa
Arnoldo Flores de 22 años, originario de Candela, lucha por su vida tras sufrir un traumatismo abdominal cerrado durante una práctica de rodeo extremo. El toro le propinó un pisotón directo en el hígado, causándole múltiples laceraciones hepáticas y el desprendimiento casi total de la vesícula biliar. Gracias a la rápida intervención del Hospital General Amparo Pape, el paciente fue operado de emergencia y estabilizado, salvándole la vida en un procedimiento que el director del nosocomio, Ángel Cruz García, calificó como “impecable”.
“El domingo ingresó alrededor de las 23:00 horas. Venía con sangrado interno masivo. Inmediatamente se activó el protocolo de trauma”, relató Cruz García. El cirujano doctor Almansa realizó una laparotomía exploratoria que reveló el alcance del daño: hígado destrozado y vesícula prácticamente desprendida.
“Se sellaron todas las fugas, se transfirieron 2 unidades de sangre y se aplicó empaquetamiento abdominal con compresas para controlar el sangrado residual y favorecer la coagulación natural”, explicó el director. La cirugía transcurrió sin complicaciones, y el joven salió intubado a terapia intensiva, donde permaneció bajo monitoreo constante.
Este martes, fue trasladado al IMSS de Monclova para continuar el tratamiento. “El problema no está resuelto. Las compresas deben revisarse en 24-48 horas. Si hay nuevas fugas, requerirá otra intervención”, advirtió Cruz García.
A pesar de contar con seguro social desde el ingreso, los familiares optaron por el Amparo Pape por la confianza en su respuesta inmediata. “Aquí se le salvó la vida. Cualquier paciente con empaquetamiento, intubado y en terapia intensiva es gravísimo. Ahora dependerá de cómo responda en el IMSS”, agregó.
El joven permanece crítico pero estable, en un caso que resalta los riesgos mortales del rodeo y la capacidad de respuesta del sistema de salud regional. “Se hizo todo lo humanamente posible. Ahora toca esperar”, concluyó el director.
Actualmente familiares y amigos de Arnoldo; realizan actividades y rifas en redes sociales para poyar con los gatos médicos del joven.