El subsecretario destacó que ningún alcalde ha solicitado seguridad especial, reflejo de la estabilidad y condiciones que mantienen a la entidad como el segundo estado más seguro de México
Óscar Ballesteros
LA PRENSA
FRONTERA, COAHUILA.- La escalada de violencia registrada en estados como Michoacán y Tabasco abrió una nueva conversación en Coahuila: mantener la estabilidad requiere ajustar permanentemente la coordinación entre instituciones. En ese contexto, el subsecretario de Gobierno en la Región Centro, Sergio Sisbeles Alvarado, expuso que los recientes ataques en el país confirman los riesgos de estrategias federales que han permitido el avance de grupos criminales.
Sisbeles enfatizó que, en contraste con esas regiones, Coahuila sostiene un modelo de trabajo conjunto encabezado por el gobernador Manolo Jiménez Salinas a través del Consejo Estatal de Seguridad Pública. Esta estructura permite comunicación diaria con el Ejército Mexicano, la Guardia Nacional y las corporaciones municipales, todas integradas bajo el Mando Único.
El funcionario destacó que ningún alcalde del estado ha solicitado apoyo extraordinario por temas de inseguridad, un indicador que —dijo— refleja la eficacia de la coordinación territorial. Detalló que recientemente recorrió la cabecera municipal de Sierra Mojada junto al alcalde Elías Portillo, donde constató un ambiente de orden. Situación similar observó en Candela, en reuniones con el edil Fernando Juárez.
Parte del blindaje, añadió, se sostiene gracias a la inversión continua en equipamiento. En Torreón, el Gobierno del Estado entregó más de 160 unidades como parte de un paquete superior a 700 millones de pesos, además de tres nuevos cuarteles programados para esta semana, destinados a reforzar las fronteras y mejorar la respuesta operativa.
Esta estabilidad, apuntó, ha permitido que la industria opere sin interrupciones y que nuevas empresas mantengan a Coahuila dentro de sus rutas de inversión. “El clima de paz facilita la movilidad de mercancías y trabajadores”, señaló.
Sisbeles concluyó que las corporaciones estatales y municipales permanecerán en alerta, priorizando la presencia en colonias y barrios. La instrucción —dijo— es sostener la coordinación y reaccionar de inmediato ante cualquier intento de intromisión delictiva.