Organizaciones intensifican una campaña preventiva para evitar crisis nerviosas, extravíos y accidentes en animales de compañía durante los festejos decembrinos
Óscar Ballesteros
LA PRENSA
Saltillo, Coahuila.– Con la llegada de las fiestas decembrinas, diversas agrupaciones protectoras de animales de la capital coahuilense lanzaron un llamado urgente para evitar el uso de pirotecnia durante las celebraciones, con el fin de resguardar la salud física y emocional de los animales de compañía.
Las asociaciones Amor por los Animales, Abogados de los Animales y Dignidad Animal A.C. intensificaron una campaña de concientización a través de redes sociales, donde difunden información y recomendaciones dirigidas a las familias saltillenses para mitigar los riesgos que cada fin de año enfrentan perros, gatos y aves de ornato debido a los estruendos.
Explican que los estallidos provocados por fuegos artificiales se traducen para muchas mascotas en episodios de pánico severo, pues poseen una alta sensibilidad auditiva que los hace reaccionar con temor descontrolado. Esa condición los impulsa a buscar refugio o escapar, lo que incrementa la posibilidad de extravíos, accidentes y estados de desorientación que ponen en peligro su integridad.
Las organizaciones recalcan que el impacto emocional puede derivar en crisis nerviosas, ansiedad extrema y estrés agudo, afectaciones que frecuentemente pasan desapercibidas ante la normalización del uso de pirotecnia en estas fechas.
Como parte de las medidas preventivas difundidas, se invita a las familias a pasear a sus perros antes de los festejos, para que puedan ejercitarse, relajarse y cubrir sus necesidades fisiológicas, con el fin de que permanezcan más tranquilos al regresar a casa. Recomiendan también ubicarlos en una habitación cómoda y ventilada, aislada del ruido directo de las detonaciones, con acceso a agua, comida, juguetes y una manta que les ofrezca seguridad.
El acompañamiento humano resulta indispensable, por lo que sugieren permanecer con ellos durante el periodo en que se escuchen explosiones, ya que la presencia de sus cuidadores reduce considerablemente el miedo y la tensión.
Además, hacen hincapié en que el uso de sedantes no debe considerarse una solución inicial. Solo en casos específicos y bajo prescripción de un médico veterinario puede recurrirse a medicamentos, debido a los riesgos que implica administrarlos sin supervisión profesional.
Las agrupaciones insistieron en que Navidad y Año Nuevo pueden disfrutarse sin poner en riesgo a los animales, y recordaron que la empatía hacia ellos también fortalece el bienestar comunitario. Celebrar con responsabilidad, aseguraron, puede marcar la diferencia entre una noche festiva y una experiencia traumática para quienes dependen de los humanos para sentirse seguros.