Por Fabiola Sánchez
Jesús N, joven adicto que se quitó la vida en el interior de una casa de rehabilitación donde recientemente había ingresado, ha dejado un gran vacío y tristeza a sus compañeros militantes de esta comunidad de ayuda contra la adicción.
El pasado miércoles el joven de apenas 29 años decidió poner fin a su existencia colgándose de una ventana en la cocina del Grupo de AA, ubicado en la calle Hidalgo casi esquina con Ildefonso Fuentes de la Zona Centro.
Ante estos lamentables hechos Orlando N, militante desde hace 5 años de esta comunidad detalló que la ausencia de Jesús es muy dolorosa, ya que él era un joven alegre y con muchas ganas de superarse de esa adicción que lo hizo perder la confianza de su familia.
Detalló que en esta casa de rehabilitación se tiene un padrón de 26 militantes y hay algunos que por decisión deciden internarse por un cierto tiempo para lograr una pronta recuperación y entre los internos se encontraba el joven que se quitó la vida.
Mencionó que Jesús estaba en un estado depresivo y ante los graves problemas desde que dejó la droga, decía que escuchaba voces y por eso los compañeros de guardia se mantenían mucho al pendiente de él apoyándolo.
“No sé exactamente lo que pasó ese día, yo me enteré hasta un día después que llegue a la junta y vi a todos con caras tristes y al comentarme lo sucedido, un escalofríos invadió mi cuerpo y más aún cuando ingresé a la cocina y vi de donde se había colgado”.
Narró que en la cocina hay un marco de una ventana y arriba estaba un mecate con el cual Jesús N, sin se ató dando fin a su vida, dejando un silencio y vacío en esta casa de rehabilitación.
Orlando es un militante más de apenas 19 años de edad y a su corta edad ya recorrió el mundo de esta enfermedad y sabe lo depresivo y el daño que causa, es por eso que lamenta mucho que su compañero haya tomado esta fatal decisión cuando ya estaba dando el primer paso para tener una mejor vida.
“Las drogas y el alcoholismo, no son un vicio, sino una enfermedad y para eso aquí en el grupo de AA, a base de experiencias y pláticas de nosotros mismos es como nos ayudamos a reflexionar y nos ayuda a orientarnos lo que ya no queremos más para nuestras vidas y así es como nos rehabilitamos”.
Dijo que estos hechos los recordarán por siempre y para evitar que una situación similar se repita ya los militantes con más antigüedad se han acercado a cada uno de los nuevos miembros para dar consejos y recordarles que no están solos y que hay que seguir luchando en la vida.
