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Los trabajos de reparación de la megafuga de agua potable sobre Canal de Miramontes, Colonia Educación, Alcaldía Coyoacán, continúan.
Después que los trabajadores comenzaron a utilizar maquinaria pesada para retirar lodo, el agua cristalina cambió su color a café.
Por lo que, Avenida Miramontes está cerrada en dirección al sur, mientras que en dirección a la estación Taxqueña del Metro, los carriles fueron adaptados en doble sentido.
Hace cuatro horas, el Sistema de Aguas de la CDMX tuiteó que el coordinador general de la dependencia, Rafael Carmona, coordina los trabajos de reparación de la fuga de agua.
Esta fue provocada por trabajos que realizaba la CFE, la cuál causó que, en minutos, se inundaran alrededor de 17 casas, de acuerdo con vecinos afectados, este domingo 27 de junio.
Alrededor de las 17:00 horas, los trabajadores que ponían cableado subterráneo rompieron la tubería, lo que provocó una fuente de agua que alcanzó los cuatro metros de altura, contaron habitantes.
Más de media hora después, personal de Sacmex disminuyó el afluente al parar la operación de la planta Xotepingo, pero el remanente en los tubos seguía saliendo hasta las 22:00 horas, informó el Sistema de Aguas de la Ciudad (Sacmex).
Personal de la dependencia dijo que la fuga podría controlarse en 24 horas y la reparación de la tubería durará alrededor de tres días.
Esto afectó el suministro de agua de alrededor de mil casas de la Colonia Educación, informó el representante del Comité de Participación Comunitaria (Copaco), José Díaz Jiménez.
Perjudicaría también otras dos colonias y posiblemente a Iztapalapa, dijeron trabajadores de Sacmex.
El retorno 707 fue el más dañado, el agua subió en la calle 10 centímetros y el encharcamiento fue de 30 por 10 metros, en las viviendas los vecinos reportaron tirantes de 45 y 50 centímetros.
«En cuestión de minutos, en media hora toda la calle se inundó y se empezó a meter el agua a las casas, reventó más la tubería y era como una fuente», contó uno de los afectados.
Casas de la Calle Castellanos Quinto resultaron dañadas como la de Gabriela Sepúlveda, quien estaba en una reunión fuera de su casa y un repartidor que le haría una entrega, le informó que había una inundación.