El Presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que las empresas españolas pueden venir e invertir en México, aunque advirtió que hay una nueva realidad y ya no se permite robar.
-Muchas Pymes españolas que desearían venir a México se echan para atrás, ¿qué se tiene que hacer para que las relaciones (entre España y México) generen certidumbre?, se le preguntó.
«Pues lo que se tiene que hacer es entender que hay una nueva realidad en México y que ya no se permite robar, eso es todo», respondió.
En conferencia desde Palacio Nacional, el Mandatario federal reiteró que las empresas españolas vieron a nuestro País como tierra de conquista.
Afirmó que durante las administraciones anteriores dichas empresas se dedicaron a saquear y a robar con el apoyo de las autoridades mexicanas.
«Tenemos casos como el de Repsol, de España, contratos jugosísimos, muy buenos para ellos, muy malos para la hacienda pública de México», sostuvo.
«El caso de OHL, una empresa constructora también preferida por el Gobierno, y el caso más ofensivo es el de Iberdrola».
López Obrador acusó que Iberdrola se convirtió en un monopolio en México, al grado que controla el mercado eléctrico del País.
«Y la ofensa mayor, eso se lo dije al presidente del consejo de administración de Iberdrola, es que se llevaron a trabajar a la secretaria de Energía del Gobierno de México», criticó.
«Y contrataron como consejero de Iberdrola al ex Presidente Calderón, eso no sucede en ningún país del mundo».
El Jefe del Ejecutivo aseveró que ya no se permiten esas conductas, aunque subrayó que continúa la relación económica.
Tras destacar que España es el segundo socio comercial de México, López Obrador confió en que se mantendrán las «buenas relaciones» con el país europeo.
Por ejemplo, dijo el Mandatario, los españoles tienen mucha presencia en México con instituciones financieras como BBVA y Santander.
«Desde el principio hicimos el compromiso de que no íbamos a cambiar las reglas de cobro de comisiones y que íbamos a cumplir con lo que habíamos dicho en campaña de no hacer modificaciones al funcionamiento de la banca y hemos cumplido», presumió.
«Entonces se pueden seguir haciendo negocios en México. México sigue estando abierto a toda la inversión extranjera y a la inversión de España, negocios lícitos que no se hagan al amparo del poder público, que no se hagan mediante el influyentismo, que no tengan que ver con la corrupción».
López Obrador subrayó que era necesario poner un límite a la «descomposición» que había en las relaciones económicas y comerciales.
«En donde perdía México, en donde se consideraba, lo repito, que México era tierra de conquista. Eso ya no se va a permitir, pero no hay ninguna aversión al pueblo español que respetamos mucho», agregó.
«Hay una nueva realidad en México y que ya no se permite robar»
«México sigue estando abierto a toda la inversión extranjera y a la inversión de España, negocios lícitos que no se hagan al amparo del poder público»
«Porque como decía el Presidente Juárez: ‘nadie está obligado a lo imposible'»
No estamos obligados a lo imposible, dice sobre arbitraje contra CFE
Cuestionado sobre el arbitraje internacional que enfrenta la Comisión Federal de Electricidad por el impago de gas a la empresa estadounidense Whitewater Midstream, el titular del Ejecutivo indicó que la CFE está analizando lo que se puede hacer de acuerdo a las posibilidades, pues nadie está obligado a lo imposible.
«Eso que tú dices lo está viendo la CFE y se va a analizar, hasta lo que se pueda hacer legalmente y de acuerdo a nuestras posibilidades, porque como decía el Presidente Juárez: ‘nadie está obligado a lo imposible'», señaló.
«Parte de mi tiempo, considerablemente importante, lo he tenido que dedicar a enderezar entuertos, porque el Gobierno permitió el saqueo de la Hacienda Pública y estamos encontrando todavía contratos leoninos, contratos en donde se benefició a empresas a costa de perjudicar o afectando la Hacienda Pública de México, estos contratos, por ejemplo, entonces muchos ya convertidos en litigios, ya en tribunales».
REFORMA publicó que el reclamo de la empresa estadounidense es por no liquidar el suministro de gas en febrero pasado, cuando se presentó la crisis climática en Texas, que afectó los precios y abasto a México.
Whitewater Midstream no informó el monto del reclamo a la CFE; sin embargo, estimaciones señalan que podría ser de unos 100 millones de dólares.