Jugadoras de futbol de Gran Bretaña, Chile, Estados Unidos y Suecia se arrodillaron antes de iniciar sus respectivos partidos en la jornada inaugural de la disciplina de Tokio 2020 como una forma de protesta contra el racismo en el deporte y en la sociedad en general.
Aunque el Comité Olímpico Internacional (COI) no permite manifestaciones políticas ni religiosas en sus competencias se ha mostrado flexible para este tipo de acciones siempre y cuando sean como un apoyo solidario a causas sociales o para externar inconformidad sobre hechos que atentan contra la dignidad humana, y se hagan antes de los juegos.
Además, todas las manifestaciones de este tipo deben ser acordes a los ideales y principios del movimiento olímpico como la igualdad, la fraternidad, la solidaridad y el respeto, entro otros.
Las futbolistas de ambas selecciones pusieron una rodilla en el césped con la intención de mandar un mensaje de que el deporte, o al menos el futbol, es solidario contra la discriminación en cualquiera de sus expresiones
Las británicas derrotaron 2-0 a las sudamericanas en el Sapporo Dome, mientras que las estadounidenses cayeron 3-0 ante las suecas en el Estadio de Tokio.
