fuente: milenio
En el marco del retorno a clases a nivel nacional, la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) rechazó el regreso clases presenciales, además, solicitó al gobierno estatal y federal asegurar las condiciones, tanto sanitarias como operativas, para retomar actividades.
En rueda de prensa en la capital del estado, Fredy Gutiérrez Mayo, integrante de la comisión política de la CETEG, detalló que el magisterio disidente no se opone al inicio del ciclo escolar, en tanto las clases se realicen de manera virtual y sin exponer la salud de los alumnos o profesores, pues estiman que en tres semanas ocurra un repunte de contagios de covid-19 en las escuelas.
También acusaron que los datos presentados por el gobierno estatal, dónde se indica que más de un millón de alumnos regresaron a las aulas en 17 municipios, son suposiciones, ya que durante la jornada de ayer, la CETEG mantuvo comunicación con los directores de sector y no han podido dar la cifras reales de los alumnos que acudieron a las aulas.
Además, presentaron los resultados de una encuesta realizada a nivel nacional a los padres de familia, donde indicaron que el 81 por ciento de 60 mil encuestados «no están de acuerdo con el regreso a clases presenciales», lo que representa que nueve de cada diez padres no están de acuerdo por temor al contagio de sus hijos en las escuelas, en tanto que el 94 por ciento rechazó firmar carta de responsabilidad del gobierno federal.
Asimismo, señalaron que en 47 mil planteles de cinco estados, entre ellos Guerrero, no se dio el regreso a clases presenciales y existe un desorden en la coordinación ante la falta de indicaciones claras por parte de las autoridades educativas a nivel federal y estatal. Además, mencionaron que que no se proporciona el material necesario para los filtros sanitarios ni se cuenta con información de su efectividad.
En próximos días, la CETEG realizará un conteo de las escuelas que hayan regresado a clases presenciales, así como el número de alumnos que acudió a los planteles y cuantas familias optaron por no arriesgar a sus hijos al mantener el esquema de clases virtuales.