En plan seductor y rompecorazones, Ricky Martin estrenó el Movimiento Tour 2022 en el Foro Sol, y, aunque no lo llenó, a nadie le quedó a deber por energía y pasión.
OCESA reportó 52 mil asistentes al lugar, cuyo aforo es de 65 mil. Todos se contagiaron de la buena onda del boricua y vibraron con los arreglos más urbanos de «Livin’ La Vida Loca», pieza con la que abrió, y «The Cup of Life», con la que cerró.
De negro, con pantaloncillos y una capa muy fashion que lo hizo superhéroe por unos instantes, el ex Menudo cantó, bailó, se contoneó y le brindó momentos de felicidad a la audiencia. Se acompañó de músicos y bailarines.
«Celebro a la mujer todos los días del año. Hoy estoy luchando por la mujer: les agradezco lo que son, se lucha por la mujer en todos los países. Este show está dedicado para ti, para las mujeres que están presentes, para las que ya no están aquí.
«Gracias por dejar la vida, por darnos todo, por darnos la vida», expresó en el show con el que inició la reposición de conciertos que fueron postergados hace dos años, por la pandemia.
Con una producción no tan vistosa en comparación con la de otras figuras que han tocado en el mismo inmueble en años recientes, como Panteón Rococó, Arctic Monkeys, Café Tacvba o The Cure, el puertorriqueño recurrió a una pantalla gigante central y a dos laterales para que lo viera la audiencia más distante.
En el esplendor de sus 50 años, Ricky Martin, representante emblemático de la comunidad LGBT+, mostró que físicamente está en su mejor momento: vital, radiante, risueño, coqueto. Interpretó «La Mordidita», «Fuego de Noche, Nieve de Día» y «María».
Con «Shake Your Bon-Bon» mostró un número ambientado como en una mesa de juegos de casino, entre dados y cartas, y con «Tal Vez» y «Vuelve» hizo gala de su más profundos sentimientos.
Su audiencia, fiel y conocedora, bailoteó con las canciones movidas y coreó las baladas cortavenas. Reunió a distintas generaciones: abuelitas e hijas jóvenes, compadres con sus respectivas parejas, grupos de la comunidad LGBT+, adolescentes y chavas que le gritaron todo tipo de piropos.