Científicos australianos probarán usar paneles solares impresos para impulsar un Tesla en un viaje de 15.100 kilómetros que comenzará en septiembre, y que esperan que haga reflexionar al público sobre las medidas para ayudar a evitar el cambio climático.
CNN En Español
El proyecto Charge Around Australia (CAA) instalará 18 paneles solares de plástico impresos en un auto eléctrico Tesla, cada uno de ellos de 18 metros de largo, y los desplegará junto al vehículo para absorber la luz solar cuando necesite una recarga.
Paul Dastoor, el inventor de los paneles solares impresos, dijo que el equipo de la Universidad de Newcastle no solo probaría la resistencia de los paneles, sino su potencial rendimiento para otras aplicaciones.
«En realidad, este es un banco de pruebas ideal para darnos información sobre cómo podríamos utilizar e impulsar la tecnología en otros lugares remotos, por ejemplo, en el espacio», dijo Dastoor a Reuters en la ciudad de Gosforth, al norte de Sydney.
Los paneles solares impresos se fabrican en un plástico PET ligero y laminado que puede fabricarse a un costo inferior a US$ 10 el metro cuadrado.
Los paneles se fabrican en una impresora comercial utilizada originalmente para imprimir etiquetas de vino.
Dastoor dijo que utilizar los paneles para impulsar un vehículo haría que los australianos pensaran más en los vehículos eléctricos y podría ayudar a aliviar su «ansiedad por el alcance».
«La comunidad busca este tipo de respuestas a los problemas que se le presentan, día tras día, en torno al cambio climático», dijo.
En su viaje de 84 días en el Tesla, el equipo tiene previsto visitar unas 70 escuelas para dar a los estudiantes una muestra de lo que puede deparar el futuro.
Al cuestionarlo sobre lo que opinaría Elon Musk, creador del Tesla y fundador de Tesla Inc, sobre el proyecto CAA, Dastoor dijo que esperaba que estuviera satisfecho.
CAA estaba «mostrando cómo nuestra tecnología innovadora se combina ahora con sus desarrollos para generar nuevas soluciones para el planeta», dijo Dastoor.