Luego de presentar su iniciativa «No Golf, No Life» en la Casa Club de Bosque Real, el boxeador Saúl «Canelo» Álvarez pasó al campo para demostrar durante un torneo por invitación que este deporte es una de sus mayores pasiones desde hace tres años.
«Es algo muy adictivo, amo jugar golf, es una parte muy importante en mi vida personal y profesional, manejo mucho estrés, entonces éste me relaja y me distrae, por eso forma parte de mi rutina», dijo el mejor peleador mexicano libra por libra.
«Lo que más me gusta es la competencia, entonces yo juego para ganar, muchos lo hacen para divertirse, pero yo siempre pienso en ser el mejor aunque esté afuera del ring».
Fue a las 9:24 horas cuando sonó el escopetazo de salida del torneo y el tapatío partió en grupo junto a sus amigos Jacobo y Arturo Said, Ernesto Ochoa, Álvaro Velasco y Jaime Faska, para competir en la modalidad por parejas bola baja con handicap.
Entre los 144 jugadores invitados estuvieron Ernesto Gómez, suegro de «Canelo», así como los ex futbolistas Jorge Campos y Luis García, además del presidente del Consejo Mundial de Boxeo, Mauricio Sulaimán, quien jugó junto a sus sobrinos, Héctor y Andrés.
«Es un evento maravilloso en donde el boxeo y el golf se unen a través de un líder, el ‘Canelo’, para demostrarle a los niños que pueden llegar lejos mediante el deporte», aseguró Mauricio Sulaimán.
Desde su carrito, el empresario Carlos Bremer recordó que el objetivo del certamen era generar recursos para los jóvenes golfistas de México.
«Agradezco a todos los participantes, pues se rompió récord de asistencia, se tuvieron que aceptar a 24 competidores más, todo por ver a su ídolo ‘Canelo’ y, al mismo tiempo, apoyar al talento nacional», aseguró Bremer.