Para el Grupo Sororidad es lamentable que en la actualidad apliquen impuesto rosa a los productos, solo por estar dirigido al público femenino, y que los Diputados rechacen iniciativa para eliminar IVA a productos de higiene menstrual
María de Luna González mencionó que es costumbre que en la política no existan reformas relacionadas con los derechos de las mujeres, toda vez, que los parlamentos están ocupados mayoritariamente por los hombres
La colaboradora de Sororidad Monclova como ejemplo mencionó el impuesto rosa, es decir, el sobreprecio de un producto o servicio sólo por estar dirigido a un público femenino a través diseños que parten de estereotipos de género.
Entre los productos que registran una mayor diferencia de precios por esta razón está la ropa y los objetos de cuidado personal e higiene, que tienden a ser más caros en el mercado por ser rosas.
Incluso de acuerdo a un análisis de la Profeco a los precios de más de dos mil productos “femeninos” se encontraron diferencias de muy marcadas que varían del 6 hasta el 15 por ciento más de precio.
Y mencionó “Si lo piensas no tiene mucha coherencia, sin embargo, entiendo que la economía juega una mancuerna a la hora de decidir por tal o cual propuesta, pese a afectar la economía de las mujeres”.
Dijo que falta que visibilicen como prioridad las problemáticas de la mujer ya que lamentablemente cuando se trata de hablar de los derechos de la mujer y condiciones de vida digna tienden a minimizarlas.
“Nos falta visibilización y empatía por parte de los varones, es indignante que los que están al frente de la política no se sienten a escuchar y entender cómo funcionan estas dinámicas que favorecen a la vida de las mujeres”.
Dijo que es un atropello a los derechos humanos, toda vez, que la menstruación es una condición biológica y es incongruente que te cobren un IVA por adquirir productos de higiene menstrual como toallas sanitarias o tampones.
Y expresó “La mujer lo va a pagar, pero ¿Por qué tendríamos que estar pagando un impuesto extra?, lo ven como negocio, porque las mujeres van a seguir consumiendo toallas sanitarias, tampones o copas menstruales”.