Un antibiótico tomado después de tener sexo sin condón puede reducir drásticamente el contagio de tres enfermedades de transmisión sexual (ETS) bacterianas en grupos de alto riesgo, mostraron ayer los datos de un estudio clínico.
La Jornada
La investigación fue presentada en la 24 Conferencia Internacional sobre el Sida en Montreal, donde fue celebrada como un avance importante.
“Esto tiene la capacidad de cambiar las pautas” de la práctica clínica, señaló Steven Deeks, experto en VIH de la Universidad de California en San Francisco, que no participó en el estudio.
La doxiciclina redujo las tasas de gonorrea y clamidia en más de 60 por ciento entre hombres que tienen sexo con hombres, y también pareció ser muy eficaz contra la sífilis, pero no hubo suficientes casos para ser estadísticamente significativo.
El ensayo se detuvo antes de tiempo porque los expertos descubrieron que el fármaco funcionaba indudablemente y no habría sido ético continuar con las pruebas.
El estudio se realizó en momentos en que han aumentado las tasas de estas enfermedades, en particular entre los hombres que tienen sexo con otros, que han reducido el uso de condones desde la llegada de las pastillas de profilaxis previa a la exposición (PrEP) al VIH.
La pastilla, con una dosis de 200 miligramos, se administró dentro de los tres días posteriores a la exposición. Los participantes podían continuar tomándola según fuera necesario dependiendo de cuánto contacto sexual tuvieran. La intervención redujo la incidencia de enfermedades de transmisión sexual en 62 por ciento en el grupo que vivía con el VIH y en 66 por ciento en el que tomaba la PrEP para el virus.