Si al menos 95 por ciento de la población en México usara el cubrebocas se podrían evitar casi 10 mil decesos a febrero de 2021 y en lugar de las 134 mil muertes estimadas se registrarían 124 mil para esa fecha, estima el modelo desarrollado por el Instituto de Métrica y Evaluación de la Salud de la Universidad de Washington.
El que no se haya implementado el uso de cubrebocas de manera generalizada en el País ha originado un mayor número de muertes, aseguró el investigador Rafael Lozano, quien participa en el modelo, uno de los más certeros en la proyección del curso de la epidemia.
«El hecho de que no lo haya hecho en tiempo, ha incrementado (la mortalidad); y el hecho de que no lo haga pues va a repercutir con más mortalidad que puede evitar. Sin duda son vidas que se salvarían y el buen uso del cubrebocas implica mucha responsabilidad.
«La discusión es que se les transfiere a los ciudadanos la responsabilidad. La responsabilidad se la hacen a la población de que está gorda, hipertensa, vieja y pues no va por ahí. Hay que proteger a la gente antes de que se muera», estimó.
Para el especialista, más que estar tomando precauciones para tener camas disponibles, lo que habría que hacer es buscar la manera de disminuir la exposición al virus con mayor protección.
«La gente no guarda la sana distancia porque no ponemos elementos para que la guarde; (no hay) uso (generalizado) de cubrebocas; hay reuniones».
El experto alertó que actualmente se registran más de 300 fallecimientos al día.
Para diciembre se estima que alcanzarán las 400 y seguirán aumentando hasta meditados de enero, hasta unas 500 diarias, de acuerdo con las previsiones.
El modelo desarrollado por el instituto diseña varios escenarios con base en los mandatos; el semáforo y el uso de obligatorio de cubrebocas. Es decir se ofrecen tres alternativas para 160 países.