Aunque este hallazgo no permitirá el resurgimiento de los dinosaurios en una especia de Parque Jurásico, el fósil brinda información importante sobre estos animales, ya que se trata de una cola de dinosaurio con plumas perfectamente preservada en ámbar.
Excelsior. Como si se tratara de una escena sacada de una película de Hollywood, científicos chinos encontraron un fósil que ya se considera una joya para la ciencia, debido a los aportes que este descubrimiento tiene en el estudio de los dinosaurios.
Dinosaurio emplumado
Y aunque este hallazgo no permitirá que resurjan estos colosales animales y que caminen entre nosotros en una especie de Parque Jurásico, el fósil brinda información importante sobre estos animales, ya que se trata de una cola de dinosaurio con plumas perfectamente preservada en ámbar.
En la pieza quedaron atrapadas también dos hormigas de una familia ya extinta denominada Sphecomyrminae.
El increíble fósil fue hallado en el mercado de ámbar de Myitkyina, en Birmania, en 2015, por el ciétifico chino, Lida Xin.
«Me di cuenta de que contenía un animal vertebrado, probablemente un terópodo, y no una planta, como se pensaba», recuerda el paleontólogo chino.
Al estudiarlo, comprobaron que se trataba de una cola de un dinosaurio petrificada que conserva varias vértebras y el plumaje.
Joya científica
De acuerdo con la revista Current Biology, se trata de un dinosaurio carnívoro que vivió hace 99 millones de años en el territorio que hoy es Birmania.
El fragmento conserva ocho vértebras de un ejemplar de dinosaurio joven, recubiertas de plumas. La cola era larga y flexible, según los autores, que no tienen dudas de que pertenecía a un dinosaurio y no a un ave prehistórica.
La cola mide unos 3,5 centímetros de longitud y podría haber pertenecido a un individuo juvenil del grupo de los celurosaurios.
Fósil de película
Aunque el ámbar con la cola de dinosaurio ya había sido pulido para venderse como una joya, los científicos lograron extraer datos importantes, como la presencia de hierro, fruto de la descomposición de la sangre.
Y aunque comenzar a clonar a estos colosales animales no es una posibilidad, la presencia de hierro despierta esperanzas entre los investigadores, que no descartan que puedan tener más información química en otros fósiles en ámbar.