Alexis Massieu
Para Lizeth Hernández, madre de Adair Obed “N” que enfrenta un proceso penal por acuchillar a su compañero de trabajo en el cuello, toda esa situación se debió a un hostigamiento laboral, una especie de bullying de la que se sentía cansado, ella lo veía raro, estresado, pero él seguía yendo a trabajar porque quería ayudarla con los gastos.
Cuestionada al terminar la audiencia celebrada el día de ayer en la que a Adair Obed lo vincularon a proceso, sobre el dinero que el día de los lamentables hechos su hijo le cobró a su ex compañero de trabajo Eduardo “N”, ella señaló que no sabía, pero recordó que muchas veces él llegaba con poquito dinero del trabajo, y le decía cosas como que se le había perdido.
“Decía que en la carnicería lo maltrataban, que el señor (dueño) lo insultaba, lo dejaba salir muy noche, y no lo tenían asegurado, yo le decía que se saliera de trabajar, pero él; me dijo que tenía que ayudarme con los gastos, somos personas humildes”.
Su hijo le decía que el patrón a veces lo trataba bien y a veces mal, que llegaron a tomar cerveza en la bodega de la carnicería, que se las vendía, inclusive el día en que ocurrieron los hechos, algo que ella no quiso decir pensando que le pudiera perjudicar en el juicio.
“Yo miraba que mi hijo siempre decía que el dinero se le perdía y se le perdía, y para mí que a lo mejor ellos le pedían dinero a él, y a mí me llegaba con poquito dinero a veces, nunca me dijo porque –tenme la confianza–a veces llegaba con el celular y ahí lo veía raro estresado, ¿te amenazan o qué?, dime… supuestamente ahí lo querían mucho pero no le ponían seguro”.
Lizeth Hernández, considera que en todo lo ocurrido también hay responsabilidad del dueño de la carnicería, señalando que los trabajadores no le duraban porque tiene un carácter explosivo, indicando que a Adair Obed “N” lo hostigaban, lo maltrataban y ya lo tenían cansado del bullying que le hacían, “por mí que la carnicería la clausuren, la cerraron un día y ya está abierta”.
Su hijo explicó, tiene 18 años de edad, los cumplió el 18 de enero, estudió hasta la secundaría de forma abierta, y se puso nervioso en la audiencia, y como dijo su abogado en juicio, considera es una persona vulnerable, razón por la que pedirá que lo revise un psicólogo, quiere que la declaración que dio el día de ayer no se tome en cuenta porque estaba nervioso.
Le pido a Dios que a mi hijo no me le den mucho tiempo, fue una riña lo hizo porque se sintió a tacado, cansado hostigado, las otras personas lógico, lo más seguro es que quieran dinero, yo soy una persona humilde, yo voy a pedir Dios que me ayude, él es cristiano, andaba un poco descarriado. Espera que lo traten bien en Saltillo.