Fabiola Sánchez
Desaparece joven universitaria. Tras una discusión con su madre, Moraima Isela Jiménez Serrano, de 20 años, salió de su domicilio ubicado en la colonia Guerrero y por más de 12 horas se mantuvo incomunicada con su familia, para horas más tarde a través de un mensaje de texto confirmar que su ausencia era voluntaria y reportar que se encontraba bien.
Familiares de la joven, angustiados por su desaparición viralizaron la fotografía de Moraima en las plataformas digitales, causando esto solidaridad entre la sociedad que se ha encargado de compartir y expresar muestras de apoyo moral a la madre de la joven.
Selene Serrano García, tía de la desaparecida, detalló que fue la madre de Moraima, alertó a su familia de la desaparición, esto luego de haber sostenido una fuerte discusión con la joven, quien salió de su domicilio sin rumbo fijo a altas horas de la noche.
Mencionó que, fue hasta la mañana del pasado lunes, que su sobrina se contactó con su madre a través de un mensaje de texto, donde le informó que era su voluntad no regresar a su casa, por motivos personales que no se los plantearía a ella, sino a sus familiares.
Detalló que, al darse por enterada la familia que la joven se encontraba estable y su desaparición era voluntaria, intentaron comunicarse con ella vía telefónica para pedir una explicación, logrando tener respuesta hasta la tarde de ese mismo lunes.
“Mi sobrina ya respondió, ya hablé con ella, está bien y no quiere regresar a casa de su madre, su único motivo es que está cansada del maltrato de recibe, los golpes y la falta de comprensión y consideró son suficientes para que ella haya tomado esa decisión”.
Detalló que, la joven es estudiante de la universidad UTRCC, a quien describe es una excelente hija, quien apoya siempre en las labores del hogar y sus hermanos menores, sin embargo, reconoció es su madre una mujer de carácter fuerte quien nunca le ha brindado el apoyo necesario a su sobrina y frecuentemente tenían enfrentamientos por disgustos sin importancia.
Comentó que, su sobrina Moraima, le informó donde se encontraba y le aseguró se encontraba en buen estado y era bien atendida por la familia que la cobijó y ahí permanecería por algunos días, decisión que por ser mayor de edad debería ser respetada por su madre.