Oscar Ballesteros
La confusión que se ha dado entre los diagnósticos de depresión y melancolía ha causado problemas para darles el tratamiento adecuado a los pacientes y con esto, los pensamientos de atentar contra su vida pueden pasar inadvertidos, indicó el terapeuta Omar Villa.
“Los casos de melancolía, que es la antesala de la depresión, los criterios diagnósticos son muy confusos”, por lo que es complicado atender al paciente y prevenir ciertas situaciones, dijo el terapeuta; la principal diferencia es la funcionalidad de las personas, una vez que se presenta un cuadro depresivo es notoria la falta de concentración del paciente.
Sin embargo, cuando se trata de melancolía, realiza sus actividades y se desenvuelve con naturalidad la mayoría de sus días “siguen con normalidad en la casa y con sus actividades, son personas que tú las ves en el trabajo, en una fiesta que estaba bien y al siguiente día te enteras de la noticia de que atentó contra su vida”, comentó Omar Villa.
Esta es la situación que complica realmente el trabajo de la atención psicológica, pues el tema de la depresión ha sido muy focalizado, dejando atrás la melancolía cuando existen pacientes con pensamientos suicidas sin entrar en la etapa depresiva.
Agregó que a este fenómeno se suma el actual pensamiento autosufciente y que en las generaciones actuales suele ser negativo o pesimista, por lo que se niegan a recibir ayuda, todo lo determinan desde su elección.