En el País, por cada 10 egresadas de alguna carrera universitaria en materia energética, apenas una alcanza un puesto de liderazgo en el sector.
Este claro signo de la subrepresentación de las mujeres en el sector energético en México fue uno de los resultados que arrojó hace unos años la primera Hoja de Ruta de Género para la Transición Energética, un esfuerzo pionero para contar con datos estadísticos para la toma de decisiones y la elaboración de políticas públicas para el rubro.
«Es uno de los proyectos más importantes para nosotras, en relación a saber cómo está el tema de género hoy día en México en el sector de energía», refrenda en entrevista Aideé Zamora, coordinadora general adjunta de la Red de Mujeres en Energía Renovable y Eficiencia Energética (Red MEREE).
«Que no nos digan que no existen las expertas. Sí, sí hay».
Aideé Zamora
Ingeniera en energías renovablesEsta asociación es la impulsora del estudio, del cual actualmente realizan la segunda edición, consultando a estudiantes, profesionistas, docentes, investigadoras y emprendedoras desde el sitio www.mujeresenergia.org/hoja-de-ruta.
«De ahí nos da mucha información para saber cuáles son las actividades siguientes que debemos hacer a través de Red MEREE y en colaboración con otras instituciones para reducir esas brechas, resultado de lo que observamos en este estudio», apunta Zamora (Ciudad de México, 1994), ingeniera en energías renovables e integrante cofundadora de la agrupación.
Constituida formalmente como una asociación civil en 2016, esta Red surgió de un programa de sustentabilidad y género liderado por Sandra Caballero, desde el cual ya se percibía con claridad una situación alarmante: «Que el sector energía, desde el punto de vista del campo laboral, estaba altamente masculinizado», remarca Zamora, coordinadora general adjunta.
«Que teníamos poca presencia de mujeres en diferentes niveles, desde la alta dirección hasta quienes recién van egresando de la universidad, a quienes les cuesta mucho trabajo emplearse por ser mujeres», añade Zamora.
No es fortuito, entonces, que esta asociación, la primera red de su tipo en México, abanderara dos agendas específicas: la transición hacia la energía sustentable y la igualdad de género, en uno de los sectores más dinámicos y a la vez uno en donde más disparidad existe hacia las mujeres en cuanto a condiciones, responsabilidades, oportunidades y retribuciones.
«Estamos enfrentando a nivel global el cambio climático, y esa lucha no la vamos a ganar siendo la mitad del equipo, solamente hombres. Necesitamos el talento, el trabajo de las mujeres para que podamos ganar esa lucha como humanidad», expresa la ingeniera industrial Elsa Bernal García, coordinadora de la Red MEREE, en una entrevista en el sitio de la asociación.
De una inercia de 2 mil colegas alcanzadas hacia el momento en que se constituyeron como asociación, la Red cuenta actualmente con una comunidad digital de alrededor de 15 mil personas, de la cuales el 20 por ciento son hombres.
«No estamos cerradas. Reconocemos que el cambio en el sector no es de mujeres para mujeres, es de toda la sociedad. Entonces, aceptamos hombres para que también se puedan sumar como activistas en esta causa», expresa Zamora.
Las integrantes de la Red, en tanto, tienen una variedad de perfiles, desde lo académico y administrativo en torno a la ingeniería hasta lo sociológico, la contabilidad y el derecho. Con un rango de edades que va de los 17, 18 años, momento en que definen su interés por la energía, a los 60 o 70 años, con figuras consagradas.
«Se vuelve un ecosistema muy diverso y plural justamente para compartir experiencias entre todos», indica la coordinadora general adjunta.
Empujón para crecer
Con el fomento y fortalecimiento de las capacidades técnicas de las mujeres como uno de sus principios, tal cual se lee en su «Manifiesto por la igualdad sustantiva entre mujeres y hombres en el sector energético«, uno de los esfuerzos capitales de la Red MEREE han sido las jornadas de formación.
Una serie de actividades de capacitación, empoderamiento y generación de conocimiento, todas de acceso gratuito, en torno a diferentes temáticas concernientes al sector energético. Por ejemplo, acerca de calor solar de proceso, de ciencia de datos o sobre la industria, enlista Aideé Zamora.
El valor agregado en muchas de ellas, resalta, ha sido la posibilidad de llevar a cabo recorridos por instancias como parques eólicos o fotovoltaicos, incluso de manera virtual en instalaciones en el extranjero, para que las participantes puedan conocer en primera persona tanto las tecnologías como el modo de operar.
La cifra de personas capacitadas a través de estas jornadas de formación, de las que este año celebraron la séptima edición, asciende a más de 5 mil. Y un distintivo de las mismas es que la mayoría de ponentes han sido mujeres para visibilizar su trabajo.
«Que no nos digan que no existen las expertas. Sí, sí hay«, subraya Zamora.
Por otro lado, la Red MEREE también ha hecho una labor importante de otorgamiento de becas para contribuir a la formación de expertas que, estadísticamente, ganarán 200 pesos menos que los hombres, en promedio, pero asignarán casi todo su salario a la manutención y gastos del hogar y la familia.
«Consideramos que las becas funcionan como un medio de empoderamiento para ellas. Es decir, no las vemos como un beneficiario o como una persona vulnerable, digamos, como si fuera una víctima. Al contrario, lo vemos como una oportunidad para que ellas puedan capacitarse, y que eso las ayude a encontrar un mejor empleo», precisa la coordinadora general adjunta.
Al igual que con las jornadas de formación, se trata de becas para certificarse, por ejemplo, como profesionales en energía fotovoltaica, en cuestiones de negocios ligados a lo energético y hasta para llevar a cabo una tesis en un centro de investigación en otra entidad.
Programas que son costeados lo mismo por el sistema de membresías con que funciona la Red, mediante alianzas con asociaciones y empresas del sector, o a través de la aportación voluntaria de alguna de las integrantes de mayor trayectoria, quienes directo de su bolsa becan a una colega recién egresada precisamente para costear su estancia como tesista en alguna institución.
Al día de hoy, en total, mil 530 mujeres han sido apoyadas con una beca directamente por parte de la Red, y 246 con una beca en colaboración.
El impacto conseguido
Lo que no se nombra no existe, dice la ingeniera en energías renovables Aideé Zamora.
De ahí que el sólo haber nombrado el problema existente en materia de género en el sector energético constituya el primer gran aporte de la Red MEREE a través de estos años de trabajo.
Más allá de las cifras en torno a las becas otorgadas, las mujeres capacitadas o todas las horas dedicadas a sensibilizar en materia de género -más de 8 mil 500 hasta ahora-, Zamora destaca los propios testimonios de colegas suyas que han tenido la oportunidad de emplearse, de emprender.
«De hacer lo que ellas pensaban y querían pero no se atrevían. Ese es el cambio más importante«, estima la coordinadora general adjunta de la Red, quien incluso se cuenta ella misma como un ejemplo de ello.
Y es que, a partir de las vivencias de la mano de Red MEREE, Zamora decidió emprender con su propia empresa, Grupo Amerali, dedicada al desarrollo de proyectos solares en temas de generación de electricidad y calor.
«Lo que a mí me ayuda y me empodera de Red MEREE es compartir y contar con una red de apoyo que te hace creer que sí puedes hacer las cosas, y que cuando ya las haces también te fortalece a través de sus capacitaciones y a través de la experiencia de otras mujeres que también son emprendedoras en el sector«, comparte la CEO de Grupo Amerali.
¿Cuáles siguen siendo los problemas más urgentes de resolver?
La brecha salarial en el sector; la promoción en puestos de liderazgo, y la visibilización, que siguen hoy día predominando muchos eventos, muchos foros y muchos trabajos en los que se les da la preferencia a los hombres por el simple hecho de serlo, y no a las mujeres por todos los estereotipos que hay.
Y uno de los aspectos más complicados es cómo hacemos para que los tomadores de decisiones creen políticas que permitan incluir a las mujeres en el sector. Esperamos también que desde ese lado la parte política pueda permear, porque es un brazo muy fuerte también para todo este tipo de movimientos que se están haciendo.
Para participar en las diferentes convocatorias de la Red MEREE, Zamora insta a seguir sus diferentes redes sociales, como Twitter (@MujeresEnergia). Y las interesadas en formar parte del grupo a nivel organizacional pueden hacerlo a través del sitio www.mujeresenergia.org/membresias.
