El periodista Jesús Pintor Alegre, quien fue liberado tras haber sido secuestrado el 27 de diciembre en Guerrero, dijo que sus captores se lo llevaron por equivocación, ya que pensaron que trabajaba en Escenario Calentano, la cual describió como una “página temeraria”, pero “irresponsable”, motivo por el cual lo levantaron a él y a los dos administradores: Fernando Moreno y Alan García, uno de los cuales también dejaron ir.
“Me preguntaron que si pertenecía a esa página de Facebook. Yo realmente no tengo contacto, es una página temeraria, aunque de repente es un poco irresponsable, la administra el joven Alan García que es abogado y el químico Fernando Moreno, ese era el tema que les estaba molestando”, dijo en entrevista con Pascal Beltrán del Río para Imagen Radio.
Aclaró que las otras dos personas no son periodistas, sino los administradores de dicha página que fue la que incomodó a las personas que los raptaron y a las cuales no puede identificar, ya que todo el tiempo tuvo los ojos vendados y esposado de las manos.
Además, dijo que las personas que lo tuvieron retenido no se identificaron en específico sobre a qué grupo criminal pertenecían y señaló que siempre lo tuvieron en una camioneta, en la que incluso debía dormir.
«No se identificaron, no me di cuenta de con quién estaba tratando. Me sentía confundido y con un mar de preguntas”.
Narró que el día que lo raptaron se encontraba en el Zócalo de Ciudad Altamirano y se dirigía caminando hacia una papelería en la que compraría material cuando de repente se le paró intempestivamente una camioneta blanca a la que no le tomó importancia y se siguió de largo, pero de repente le pusieron un trapo en los ojos y lo aventaron a la batea.
“Duramos en el viaje pedregoso como hora y media, más o menos. Me enteraron del tema”, dijo, pero aún hay preguntas que no ha podido responder como porqué lo confundieron.
“Me pidieron mis teléfonos y los revisaron minuciosamente; me subían a una camioneta, me subían a otra, me ponían ante el Sol con los ojos vendados y las manos esposado”, contó.
Aseguró que le daban de comer dos veces al día, pero siempre con las manos esposadas y los ojos vendados y para ir al baño debía pedir permiso. Durante los días que fue privado de la libertad aseguró que sí lo golpearon, aunque esas heridas sanan, “no así las emocionales”.
“Me golpearon en algún momento, un rodillazo en la pantorrilla es visible, me dieron algunos golpes en la cadera, en la cabeza, no fue una tortura. Los golpes físicos se pueden curar en breve, pero no así los emocionales”, dijo.
Ayer a las 23:20 horas lo liberaron cerca de Río Cuirio, en Coyuca de Catalán junto con Fernando Moreno, de quien supo que también estaba ahí porque oyó ruidos y preguntó si alguien más estaba en el lugar.
“Como que para cambiar mi rutina me subieron a una camioneta y me aventaron al río”, contó y dijo que sus captores le avisaron a sus también colegas Israel Flores, Pepe Zaragoza y Humberto Peralta que lo habían liberado y dónde se encontraba.
Jesús Pintor Alegre aseguró que no había recibido amenazas por su trabajo periodístico, sólo algunos avisos a través de comentarios en la página Yo soy tu imagen que administra en los que le pedían que bajara algunas publicaciones.
“En mi caso sólo algunos avisos, dejaban comentarios y en mi cuenta Yo soy tu imagen que administro o inquietud de algunos políticos que me pedían borrarla”, contó.
El periodista dijo que analiza aceptar la propuesta de la Secretaría de Gobernación sobre extraerlo de Guerrero luego de su cautiverio. Tanto él como Fernando Moreno ya rindieron su declaración ante el Ministerio Público.